Argentina sigue sin elegir sus representantes en el Parlasur

0
409
Foto: http://www.ncn.com.ar/

Constituido el 6 de diciembre 2006 en Brasilia, capital de Brasil y con sede permanente en la ciudad de Montevideo, Uruguay, el Parlamento del Mercosur entró efectivamente en funciones el 7 de mayo de 2007. Cuenta con 18 parlamentarios por cada Estado (además de Ar¬gentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, participan los representantes de Venezuela, con voz pero sin voto hasta que se complete su proceso de adhesión definitiva) que hasta ahora fueron designados por los respectivos congresos nacionales. Pero en octubre la ciudadanía debería ser la que elija a sus nuevos representantes por medio del voto directo. A cuatro meses de la elección, y ante el actual panorama, esa posibilidad está casi descartada.

La nueva integración del llamado Parlasur guardará relación con la cantidad de habitantes de cada país. Por el sistema conocido como “de proporcionalidad atenuada”, se acordó que Brasil tenga 75 representantes, Argentina 43, y Paraguay y Uruguay 18 cada uno. Hasta ahora, Paraguay es el único país que eligió a sus parlamentarios y los envió a la sede permanente del Cuerpo, ubicada en Montevideo. Uruguay podría elegir a los suyos en los próximos años y respecto de Brasil sus autoridades dicen poder hacerlo en 2012.

En el caso de nuestro país existía hasta no hace tanto una declarada voluntad política para que esos parlamentarios fueran electos en las presidenciales de octubre próximo. Sin embargo, la unanimidad que se demostraba en las declaraciones nunca apareció en los hechos: son siete los proyectos presentados en Diputados y cuatro los que hay en el Senado. Todos apuntan a determinar la forma en que deben ser electos los parlamentarios, pero todos desde visiones diferentes. En todo 2011 hubo dos reuniones sobre el tema en Diputados; en la primera se decidió pasar la cuestión a reunión de asesores, los que nunca se pusieron de acuerdo. Y ya no se habla del asunto.

“Creemos que el nuestro es el proyecto más participativamente federal, ya que le aseguraría al menos un parlamentario a cada provincia”, dice por lo bajo un allegado al diputado West, autor de una de las iniciativas presentadas. El proyecto del ex intendente de Moreno establece que la elección de los parlamentarios se haga de la siguiente manera: por un lado se elegirían 24, uno por provincia (el que obtenga más votos). Los 19 restantes serían electos tomando al país como distrito único y en forma proporcional a los votos obtenidos, mediante el sistema D’Hont.

Otro proyecto apunta a elegir a los parlamentarios por regiones (NOA, NEA, Cuyo, Litoral y así), aunque esta iniciativa presenta dos objeciones principales: en principio, más de una provincia quedaría sin representantes; asimismo y ante la eventualidad de que dos provincias tengan un conflicto entre sí, nada garantiza que el parlamentario de una de ellas vaya a defender los derechos de la otra.

“Esperemos que nos den los tiempos y que podamos expresar en el recinto la voluntad política de la que hablamos ante la prensa”, deslizó ante NCN tiempo atrás un legislador que pidió que su nombre fuera mantenido en reserva. “No quiero que después digan que el que pone palos en la rueda soy yo”, agregó en tono de broma. Ese mismo hombre dice hoy: “Es una pena, pero no vamos a llegar. Ya casi no hay tiempo y, para colmo, ahora parece que tampoco hay voluntad”.

A primera vista, muchos ciudadanos pueden preguntarse para qué votar a parlamentarios que no estarán siquiera en el país (se calcula que deberán permanecer en Montevideo al menos cuatro días por semana tendrán dedicación exclusiva y su mandato es incompatible con representaciones locales, excepto las partidarias)-. Ante todo, y a diferencia de presidentes y cancilleres, que representan los intereses de los países, esos parlamentarios representarán y defenderán los derechos de nuestro pueblo.

Pero además su gestión es fundamental para que los intereses de los ciudadanos argentinos estén a resguardo, ya que en poco tiempo el Parlamento tomará decisiones que nos afectarán a todos. En efecto, en no más de dos años habrá una patente automotor única en todo el Mercosur. Quizá antes aún también haya una ciudadanía común: ya está en marcha la idea de lo que se dio en llamar Estatuto de Ciudadanía.

Sin embargo, habrá que esperar. “Ya no nos dan los plazos –reconoció un allegado al despacho del diputado West-. Porque, al menos según la ley, para esta elección también debiera haber internas; salvo que entre todos los bloques se decidiera hacer una excepción por esta vez. Pero no creo que eso ocurra”, concluyó. Así, cuando se acerca el vencimiento del plazo para la presentación de candidaturas y cuando las internas obligatorias están cada día más cerca, parece casi utópico que diputados y senadores de todas las bancadas acuerden en un rato lo que no han sido capaces de acordar en meses enteros.

El combo de males se completa cuando uno recuerda que el diputado West ya ha aceptado volver a ser candidato a intendente de Moreno. De tal modo no es equívoco pensar que el abanderado de la causa pronto se verá obligado a entregarle la insignia a alguien a quien, tal vez, no le importe enarbolarla

Fuente: http://www.ncn.com.ar/

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here