Arsenal y Central Córdoba terminaron su participación en la Copa de la Liga con un pobre empate

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En una jornada cargada de tensión por la definición que representa la última fecha de la Copa de la Liga, Arsenal y Central Córdoba de Santiago del Estero se vieron las caras en Sarandí sin la posibilidad de acceder a la siguiente instancia del torneo doméstico.

El duelo entre los que deseaban sumar para engrosar su promedio de cara a una futura lucha por la permanencia comenzó con un ritmo cansino que favoreció al elenco del Huevo Rondina. Los del Viaducto lograron ponerse en ventaja sin merecerlo luego de tres rebotes aislados que terminaron en la conquista de Julián Navas.

La ventaja duró poco para el dueño de casa. El golpe en el mentón hizo reaccionar al Ferroviario, que llegó al empate a través de Milton Gimenez. Los del Sapito Coleoni pusieron un poco más de justicia en el marcador, aunque su producción fue tan amplia que podrían haberse ido al descanso con el marcador a su favor.

En el complemento el espectáculo quedó deslucido por la cantidad de imprecisiones que conformaron los intérpretes. El duelo fue tan pobre que la pelota estuvo más por el aire que por el césped.

La repartición de puntos significó la firma de un armisticio en el que los únicos ataques se los dieron a la pelota. Como no podía ser de otra manera, Arsenal y Central Córdoba cerraron su participación sin pena ni gloria.

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