Banfield se encontró con un verdadero equipo y por eso no pudo siquiera empatar. Atlético Rafaela hizo todo bien y a pesar de terminar con dos menos por jugadas bruscas, lo cierto es que mostró un funcionamiento y una idea de juego que invitan a soñar a sus hinchas. Por su parte, al local precisamente le faltó eso mismo: ideas y claridad para elaborar una jugada.
En el primer tiempo, la gente no se terminaba de acomodar en el Florencio Sola, que Darío Gandín, a los 10 minutos, puso el 1 a 0, tras convertir un penal que se originó por una mano de Víctor López, bien sancionada por el árbitro Federico Beligoy. Cabe destacar que anteriormente le habían anulado un gol al “Chipi” por una leve posición adelantada. Sin embargo, al delantero no le importó, porque a los 12 recibió un balón cerca de la medialuna y con mucha clase le dio con la parte externa del botín para el 2 a 0.
Banfield quedó golpeado, sin ideas para descontar y se fue al vestuario más cerca de recibir el tercero que de lograr achicar la diferencia en el marcador. Así, en el complemento volvieron a la cancha y Rafaela, que en la primera parte había quedado con uno menos por la expulsión de Iván Juárez, se quedó con dos menos por la tarjeta roja a Federico González. A partir de ahí el local fue con lo que tuvo, pero la aparición del arquero Guillermo Sara y la defensa fueron claves para mantener la diferencia.
De esta manera, el encuentro se fue sin mayores problemas y el partido se inclinó a favor del recién ascendido, que tuvo como figura indiscutida a Darío Gandín, autor de los dos goles y muy bien secundado por Federico González, Oscar Carniello y el arquero Guillermo Sara, pilares del triunfo del conjunto de Carlos Trullet.
