El detenido y procesado empresario Lázaro Báez sufrió un nuevo revés judicial este martes, ya que la Cámara Federal de Casación rechazó por inadmisible un recurso con el que intentaba llegar a la Corte Suprema de Justicia para apartar de la causa en su contra por lavado de activos a dos camaristas que intervienen en las apelaciones, los jueces Eduardo Farah y Martín Irurzun.
El máximo tribunal penal del país desestimó por «inadmisibles» recursos extraordinarios presentados por la defensa de Báez y la de su contador Daniel Pérez Gadín contra la decisión tomada en esa instancia de rechazar la recusación de ambos camaristas, miembros de la sala II de la Cámara Federal porteña.
Farah e Irurzun actúan en la instancia de apelación para revisión de las decisiones tomadas en la causa por lavado de activos a cargo del juez federal Sebastián Casanello, quien ordenó detener a Báez un año atrás.
Estos camaristas ratificaron los procesamientos dictados en el caso, la prisión preventiva del dueño de Austral Construcciones y en una última resolución en la causa ordenaron a Casanello avanzar en la investigación sobre el origen ilícito del dinero que manejaba Báez como principal beneficiario de la obra pública en el kirchnerismo.
Báez y Pérez Gadín recursaron a ambos camaristas pero no tuvieron éxito e intentaban llegar a la Corte con recursos extraordinarios rechazados.
Los camaristas de la Sala IV de Casación Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Liliana Catucci concluyeron que los recursos para apartar a los jueces «no pueden ser autorizados» porque «no se dirigen contra la sentencia definitiva de la causa».
Fuente: Telam