Este segundo ataque, perpetrado por un suicida que detonó un cinturón de explosivos en un mercado popular, aún no fue reivindicado por ningún grupo, consignó la agencia de noticias EFE.
Horas antes, un coche bomba explotó en el barrio de Ciudad Sadr, una zona populosa de mayoría chiíta también ubicada en el este de Bagdad, causando al menos doce muertos y otros 25 heridos.
El Estado Islámico (EI) reivindicó la autoría de ese atentado, cometido en la Plaza 83, indicó que fue cometido por un suicida y precisó que tenía como blanco «una reunión de chiítas», según un breve comunicado publicada por la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas.
El recrudecimiento de los atentados en Irak coincide con el comienzo de una nueva ofensiva del Ejército iraquí para arrebatar al EI la ciudad de Mosul, capital de la provincia de Nínive (norte).
El pasado 29 de diciembre las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron en Mosul una renovada ofensiva para arrebatar al EI los barrios orientales de la ciudad, principal bastión yihadista en Irak, después de que su avance se hubiera ralentizado debido a la resistencia ofrecida por los yihadistas.
Fuente: Telam
