Al inicio de la jornada, una parte del mercado sobredimensionó la noticia de la fórmula Fernández–Fernández. Pero después aparecieron las manos grandes, más cautelosas, y la atención de los inversores se centró en lo que pasaba en el exterior donde no había buenas noticias sobre la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Lo más grave es que se pronostica que no tiene una pronta solución porque los chinos se plantaron en tres condiciones inamovibles.
Además, las expectativas de sanciones a Huawei, que entró a la lista negra de amenazas a Estados Unidos– perjudicaron a más de 30 empresas norteamericanas, aunque después del cierre de los mercados se anunció que la medida se prorrogaría hasta el 19 de agosto. Algunas tuvieron fuerte baja en las Bolsas y fueron las responsables de los números rojos del Dow Jones 0,33%, del S&P 500 0,67% y del Nasdaq 1,46%, pero ahora cabe esperar un giro en la próxima jornada.
En cambio, subieron los bonos del Tesoro y la onza de oro, un claro síntoma de que los inversores priorizaron la seguridad sobre la renta. Pero a diferencia de otras ruedas, donde se vivió una situación similar, el dólar se debilitó en el mundo, mientras el yuan, la moneda china, se estabilizó. El dólar perdió 0,10% frente a las 6 principales monedas, cedió 0,37% en México, quedó sin cambios en Brasil y logró una pequeña alza de 0,2% en Chile.
En la Argentina, pese a que recortó la fuerte suba inicial, el dólar terminó en alza. En el mercado mayorista donde los negocios fueron de USD 705 millones porque no abundaron las liquidaciones de exportadores, que esperaron que se aclarara el panorama político. El dólar en esta plaza que había tocado $45,50 y terminó en $45,22, lo que marcó una suba de 21 centavos (0,47%) respecto al viernes.
Tal vez en la reapertura del mercado este martes haya más liquidaciones porque la soja en Chicago registró una suba de 1,2% a USD 306,80 por tonelada. Aunque el informe de Fundación Capital recuerda que aún a estos valores sigue siendo un problema para la Argentina, porque está muy por debajo de los USD 342 por tonelada que se pagó en 2018, el año de la sequía.
También destaca el informe de la entidad que conduce el ex presidente del Banco Central, Martín Redrado, que el menor ingreso de dólares por esta situación, acentuará la volatilidad cambiaria.
En bancos y casas de cambio, el dólar al público subió 22 centavos a $46,42. El Banco Central, a pesar del aumento de la divisa, continuó con su política de bajar lentamente las tasas de referencia. En la licitación de Letras de Liquidez (Leliq), tomó $208.776 millones a una tasa promedio de 71,44% anual, que implica una caída de apenas 0,04 puntos. Lo más importante es que logró absorber casi $13 mil millones del mercado, porque lo que captó superó a lo que vencía.
La buena noticia fue que después de semanas de caídas de las reservas, esta vez repuntaron USD 35 millones y se colocaron de nuevo sobre el nivel USD 67 mil millones que habían perdido el viernes. En total las reservas, gracias a la suba del euro y del oro en el mundo, totalizaron USD 67.029 millones.
La Bolsa, fue a contramano del planeta y el S&P Merval, el índice de las acciones líderes, cerró con una suba de 0,53%. A las 12.30 las acciones estaban 1,45% abajo. El monto de negocios fue escaso. Se operaron $487 millones.
En Wall Street, los ADR’s argentinos -certificado de tenencia de acciones- no la pasaron bien. Las caídas superaron a las alzas. Lo positivo fue que se detuvo la suba del riesgo país. Esta vez bajó 3,39% a 911 puntos. Es que la suba del viernes había sido exageradamente alta influenciada por los que conocían de antemano la fórmula presidencial del kirchnerismo que se iba a anunciar al día siguiente.
Si hay que sacar una conclusión es que en el fin de semana hubo grandes novedades políticas, pero entre o positivo y lo negativo para el Gobierno fue una operación de suma cero. Pero falta el dato más importante. El resultado de la licitación de las Letras del Tesoro en dólares a 210 días, que comenzó el lunes y se cierra este martes a las 14 horas.
Como el vencimiento de estas Letes le cae al próximo Gobierno, la lectura va a estar centrada entre lo que puede colocar el gobierno y la tasa de interés que paga. Estos números, dirán si se acentuó o se redujo la desconfianza de los inversores.
