Por Miguel Coria. Especial para LA BANDA DIARIO
La Banda guarda en su historial un inmenso registro de nombres que se han destacado en distintos ámbitos, muchas veces el descuido nos hace advertir que esas personas notorias son necesarias de rescatarlas y ubicarlas en el lugar de la remembranza. El camino que ellos realizaron son sucesos insoslayables y acrecienta la historia de nuestra ciudad.
El deporte en la ciudad de “cantores y poetas” ha cobrado importancia desde sus orígenes. Citaremos aquella investigación de nuestros historiadores cuando relataban la llegada de los ingleses a estas tierras para trabajar en la instalación de las vías y la edificación de los galpones y la estación de trenes; cuando ellos se instalaron trajeron su familia y también sus costumbres y dentro de estas sus deportes preferidos.
Pero los potreros del fútbol abundaban en los distintos barrios y allí se erigieron nombres inolvidables del fútbol bandeño que le dieron el brillo suficiente a las dos instituciones centenarias de nuestra historia: Club A. Sarmiento y Club Central Argentino.
Hoy evocaremos a una de esas figuras, a un deportista que eligió el futbol y este
ha sido y es su vida.
Juan Antonio Leguizamón (Antuco)
Nació en el año 1939 en la ciudad de Fernández, siendo niño su familia se traslada a La Banda. Fue aquí en esta ciudad donde comenzó su derrotero, ese camino que lo llevo
por distintos equipos y por distintas ciudades de Argentina y Latinoamérica.
En la mitad de los años cincuenta se crea en La Banda la Liga Bandeña de Fútbol. Y el
Club Atlético Villa Juana, barrio donde residía, presenta un equipo en la primera división. Con solamente quince años-Don Antuco- debuta en primera en aquel primer campeonato. Fue un gran debut, porque el Club Villa Juana se consagro campeón en ese año 1955.
En 1958 firma su pase para jugar en el Club Villa Unión donde vuelve a destacarse en
su puesto; ello le permitió que el club lo presente a una prueba en el fútbol grande,
Independiente de Avellaneda. Rindió muy bien pero su pase no se concreto debido a
que tenía que volver a su provincia porque el servicio militar lo convocaba.
En el año 1960 el Club Villa Unión lo transfiere a Sarmiento donde integra el equipo de primera división en la recordada Liga Cultural. Consagrándose campeón con “los profesores”; en el año 1961 juega el torneo “Beccar Varela”, donde pierde la final con la Liga del Sud de Bahía Blanca. Un año mas tarde el Club Sarmiento lo envía a Buenos Aires para una prueba en el Club Vélez Sarfield junto a los jugadores Bellido y Vizgarra, oficiando de representante otro gran nombre del fútbol santiagueño Eduardo “el zurdo” Sayago. Allí por un tiempo se relaciona con nombres históricos del fútbol nacional como Piazza, Batajel, Zielinsky, el brasileño Eduardo “el indio” Solari, Wellington, Subiat, Yudica. Pero la añoranza por su tierra bandeña ejerce presión sobre sus sentimientos y decide regresar.
En el año 1963 el Club Sarmiento lo transfiere al Club Atlético Tucumán. Allí vuelve a consagrarse campeón en los años 1963 y 1964 con un recordado gran equipo. Tres años
después el Club Central Córdoba de Tucumán lo pide en préstamo para reforzar su primer equipo para una gira que los llevo por el país de Bolivia visitando las ciudades de Sucre, Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra, regresando luego a Atlético Tucumán donde se retiro a los treinta años de edad.
“Antuco” Leguizamón es un notable en el deporte bandeño y santiagueño. El fútbol fue su vida. Integro en los últimos treinta años la Liga Bandeña de Ex Futbolistas. Hoy sigue formando parte como directivo de su Club San Isidro en el barrio Villa Unión (donde habita junto a sus hijos y nietos) regalándole a las nuevas generaciones todos los conocimientos adquiridos a lo largo de tantos años.
