El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, visitaría la Argentina a fines de marzo, luego del histórico viaje que tiene previsto realizar a Cuba, según anticipó la cadena de noticias ABC News, con sede en Nueva York.
La información fue incluida dentro del anuncio de la visita que tiene previsto realizar el presidente norteamericano a la isla gobernada por el régimen de los Castro. «El viaje está planeado para el 21 y 22 de marzo, antes de que el presidente vuele hacia Argentina», informó la cadena norteamericana.
De todos modos, altas fuentes políticas en Buenos Aires habían dejado trascender la posibilidad del viaje, pero los rumores se mantenían en estricta reserva, según pudo saber Infobae. La duda será despejada esta mañana, cuando la Casa Blanca informe de manera oficial cuál será la fecha y el itinerario que tendrá el viaje de Barack Obama.
En caso de confirmarse, sería el final de una etapa de enfrentamientos abiertos y públicos entre Buenos Aires y Washington que se inició en la presidencia de Néstor Kirchner y que se continuó y profundizó con su esposa y sucesora Cristina Kirchner. Además, implicaría un cambio drástico en el enfoque de la diplomacia americana sobre la Argentina en particular y la región sudamericana en general.
La política de acercamiento de Obama se había iniciado apenas se confirmó la victoria de Macri en la segunda vuelta. Un extenso diálogo telefónico entre el presidente de Estados Unidos y el primer mandatario electo preanunciaba un «descongelamiento» de la relación entre ambos países.
Infobae consultó sobre la visita de Obama, pero desde la Cancillería que conduce Susana Malcorra no hubo respuesta. Sin embargo, otras fuentes políticas a las que tuvo acceso este medio reconocieron que había sido tema de conversación en lo más alto del poder en la Argentina, pero aclararon que corresponde a Estados Unidos cualquier información sobre el desplazamiento de su presidente.
«Es cierto que en el encuentro personal entre Obama y Macri estuvo trabajando toda la diplomacia argentina. El objetivo es mostrar el regreso de la Argentina al mundo y la llegada a Buenos Aires del presidente en ejercicio sería una clara señal de apertura», reconoció una fuente con acceso a la Casa Rosada.
De hecho, en una entrevista hoy con La Nación, la propia Malcorra definió la relación el gobierno de Macri quiere tener con Estados Unidos: «Una relación inteligente y madura. Tenemos que encontrar una serie de temas de agenda común que son importantes para ambos y trabajar muchísimo sobre éstos, y acordar que hay cuestiones en las que no nos vamos a poner de acuerdo».
Infobae