«Irme de River es la decisión más difícil que tomé en mi vida. Es muy difícil que la cambie. No quiero jugar con el sentimiento ni la especulación de nadie», afirmó Barovero.
El cordobés, de 32 años, reconoció que su futuro es incierto. «No cerré nada, veremos qué sucede. Lo que más quiero es que este semestre lo terminemos bien con algún objetivo cumplido», agregó
«Más allá de que mi forma de ser me muestre muy tranquilo, no tengo formas de explicar lo que siento por dentro. El reconocimiento de la gente me tendrá eternamente agradecido, por eso quiero devolverles tanto cariño mostrando mi mejor versión», finalizó.
Télam