Con el objetivo de satisfacer la demanda de decenas de familias, la Municipalidad de Beltrán abrió este lunes los comedores de invierno, a donde asisten más de doscientos chicos, desde los 3 hasta los 12 años, de toda la ciudad.
El intendente José Bravo explicó que la decisión de generar este servicio de asistencia a las familias más necesitadas surge a partir del receso escolar, dado que muchos chicos reciben en los establecimientos educativos la comida más importante de cada jornada.
“Desde el municipio estamos muy sensibilizados por la situación económica que atraviesan muchas familias. Aumentó la cantidad de personas que llegan a pedirnos ayuda, motivo por el cual hemos reforzado el trabajo de Acción Social, mediante la entrega de bolsines de alimentos. En este marco se habilitaron dos comedores, uno en el barrio Avellaneda Norte y otro en Avellaneda Sur”, precisó.
El servicio de los comedores funciona de lunes a viernes, siempre al mediodía y está a cargo del personal de Acción Social del municipio, con la colaboración de dirigentes barriales que trabajan en cada comunidad.
El menú de cada jornada está compuesto por alimentos nutritivos, ricos en vitaminas, pensados para que los niños puedan satisfacer sus principales necesidades, más aún en la temporada invernal.
“Nos preocupa el aumento de familias que están cada vez más necesitadas. El dinero que ganan cada vez les alcanza menos. Es evidente que las cosas no están bien y nosotros como autoridades debemos estar siempre comprometidos. Por eso hemos diseñado este plan, al menos durante el período en que las escuelas están cerradas, luego se continuará trabajando para ayudar a quienes más lo necesiten”, agregó Bravo.
Mientras tanto, desde la comuna ya se está planificando un gran evento, a modo de cierre de las vacaciones de invierno en los comedores, con juegos, entretenimientos, películas infantiles, chocolate y otras actividades que serán anunciadas oportunamente.