El gobernador de Santa Fe y candidato a presidente por el Frente Amplio Progresista, Hermes Binner, aclaró hoy que el objetivo para las elecciones nacionales «no es derrotar al kirchnerismo sino proponer un país normal».
Por otra parte, el mandatario admitió que pensaba que el candidato que impulsó, Antonio Bonfatti, «ganaba por un margen más amplio» y extendió su disputa con el gobierno nacional, al afirmar que «para ellos hay amigos o enemigos políticos».
«Pensábamos un resultado más amplio de diferencia, pero no contamos con lo que significa la boleta única, que es fantástica.
«Pensar en un voto castigo hacia el gobierno nacional da para varios análisis», sostuvo Binner. En declaraciones radiales, el candidato socialista se refirió a las rispideces que se produjeron con la presidente Cristina Kirchner en el acto por el Día de la Bandera y aseguró sobre esa oportunidad: «No es que no me dieron la palabra, sino que no quise (hablar)», ya que «estaba el ambiente muy convulsionado».
«El otro día, en Uruguay, en un acto, estaban todos los presidentes. ¡Qué ejemplo de democracia! Es algo muy importante, que nosotros tenemos que ver. No para copiarlos, sino para iniciar un camino que nos haga mejor a los argentinos», señaló el mandatario santafesino.
En ese sentido, Binner se lamentó porque «hoy para el gobierno, se es amigo o enemigo, blanco o negro» y remarcó que esta situación lo hace «defender constantemente los derechos de Santa Fe, porque tiene una mínima participación y una peor consulta en los cambios del país».
«Los partidos solos no logran representar a la gente. No se trata de ganarle a alguien. Hay que ponerse de acuerdo con un programa. Por ejemplo, para el campo», manifestó luego.
Binner explicó que «hay una situación política por la cual todos los partidos que integran el Frente Amplio Progresista tienen un marco común, similar» y añadió que «en función de eso se fortalece».
«Pero en el caso de que seamos gobierno, creemos que hay que convocar a otros sectores de la política nacional. Las soluciones no son simples, sino que son complejas», concluyó.
El kirchnerismo se encamina primero hacia su derrota y luego a la desaparición. Muchachos, dejensén de joder, cobren menos de Chabay y vuelvan a informar de forma imparcial.