Boca Juniors, alejado de su mejor versión futbolística aunque igualmente protagonista de todos los torneos en los que compite, recibe este miércoles a The Strongest, de Bolivia, en un partido válido por la sexta y última fecha del Grupo C, en el que busca asegurar su pase a los octavos de final de la Copa Libertadores.
El encuentro se juega desde las 21 en «La Bombonera», arbitrado por el chileno Roberto Tobar y televisado por la señal ESPN.
El Grupo C tiene como líder a Barcelona de Guayaquil con 10 puntos, luego se ubican Boca con 7, Santos, de Brasil, y The Strongest, ambos con 6, de manera que salvo los ecuatorianos que están clasificados, los otros tres tienen chances de avanzar en la Libertadores, y el que resulte tercero de pasar a los octavos de final de la Copa Sudamericana.
A la misma hora juegan en Ecuador el local Barcelona, que desea asegurarse el primer puesto del grupo para tener ventaja de cancha en los cruces de octavos de final, y Santos, que necesita un buen resultado para seguir en la Libertadores o bien asegurarse la Sudamericana.
El equipo «Xeneize» que dirige Miguel Angel Russo lleva una racha de cinco encuentros sin victorias en los 90 minutos, tres en la Libertadores y dos en la Copa de Liga, donde avanzó a semifinales tras eliminar a River Plate en cuartos de final, en una edición del Superclásico que finalizó igualada (1-1) y se definió en serie de penales.
Ese bajón futbolístico de Boca se debe en gran parte a mermas notorias en los rendimientos individuales, que se notan más en los juveniles Agustín Almendra y Cristian Medina, aunque las mayores exigencias son para el colombiano Sebastián Villa y el cordobés Cristian Pavón, dos experimentados de actuaciones flojas durante toda la serie adversa.
Para recibir a los bolivianos, Russo no cuenta con Cristian Medina, quien contrajo coronavirus, fue aislado y deja su lugar al estratega colombiano Edwin Cardona, un jugador con peso ofensivo propio a partir de su notable pegada.
Boca apuesta a lo que pueda generar el capitán Carlos Tevez, quien a los 37 años y en el tramo final de su carrera suele ponerse el equipo al hombro para desequilibrar, pese a que lógicamente por su edad siente el desgaste entre partido y partido.
En la defensa continuará en el arco Esteban Andrada y también la dupla central más consolidada que conforman Carlos Izquierdoz y Lisandro López, aunque este último será titular únicamente porque Marcos Rojo sufrió un desgarro en el aductor izquierdo, el tercero desde que llegó al club en enero pasado procedente del Manchester United inglés.
Boca intentará resolver rápido el partido ante The Strongest, el rival más débil del grupo al que superó por 1-0 en La Paz en la primera fecha, para allanar su clasificación y resguardar el físico con miras a la semifinal de la Copa de Liga que animará con Racing el lunes próximo en San Juan.
De todas maneras, Russo tiene otra incógnita a resolver para el partido ante los bolivianos, ya que además del reemplazante de Medina, madura la posibilidad de sacar del equipo a Pavón e incluir al goleador de la división Reserva Luis Vázquez, para jugar con un delantero de área más Tevez retrasado y Villa por los costados.
La inclusión del santafecino Vázquez, de 20 años, se da luego de la serie de actuaciones irrelevantes de Franco Soldano, quien no seguirá en el club después del 30 de junio puesto que no se renovará su contrato (está a préstamo y su pase pertenece al Olympiakos, de Grecia) y se sumará a una lista de bajas que completan por ahora Julio Buffarini, Emmanuel Más, Leonardo Jara y Mauro Zárate, este último afuera del club tras haber rescindido su contrato.
Su rival, The Strongest, hilvanó dos victorias consecutivas, ambas en La Paz ante Barcelona (2-0) y Santos (2-1), eso le generó ilusión aunque sabe que no le será sencillo, ya que necesita ganar en «La Bombonera» y esperar que los brasileños no lo hagan en Guayaquil.
«Estamos mejor que cuando jugamos en La Paz. Este es otro equipo, con un técnico diferente y la idea ha encajado muy bien», afirmó el goleador Jair Reinoso, en alusión a que luego de la derrota con Boca el club despidió a Alberto Illanes y contrató como DT al paraguayo Gustavo Florentín.
Más allá de las intenciones del equipo boliviano, el termómetro del partido pasará por el funcionamiento de Boca, que si lograr recuperar su identidad de juego o bien cuenta con un par de actuaciones individuales relevantes no debería pasar sobresaltos para instalarse en los octavos de final.
Fuente: telam