Mientras el país enfrenta la segunda ola del coronavirus, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, aseguró este sábado que “aunque cueste creerlo, nunca funcionó un Vacunatorio VIP” en la sede de la cartera que ella conduce actualmente y explicó por qué decidió no inmunizarse contra el coronavirus tras el escándalo que se desató en torno a ese caso y que derivó en la salida de su antecesor en el cargo, Ginés González García.
La funcionaria nacional recordó que hubiera podido aplicarse una inyección contra el COVID-19 al regresar de un viaje que hizo a Moscú meses atrás, pero que por diferentes razones prefirió no avanzar.
“No me vacuné porque cuando llegamos de Rusia estaba tomando corticoides por una situación de salud que fue transitoria. Después tuve que esperar cuatro semanas y justo antes de toda esta situación (del Vacunatorio VIP) me pareció que no era oportuno hacerlo y todavía no me vacuné”, comentó.
A su vez, Vizzotti sostuvo que “costará creer, pero la verdad es que no funcionó un Vacunatorio VIP”, sino que solamente fue “un día en el que el presidente (Alberto Fernández) tomó conocimiento de que había personas que se iban a ir a vacunar al Hospital Posadas y lo hicieron en el Ministerio de Salud”, un hecho que calificó como “inadmisible”.
En este sentido, la ministra argumentó que esa fue “realmente una excepción y no es la regla” de cómo se maneja la campaña de inmunización en la Argentina, y además reiteró que ella “no sabía” lo que estaba pasando en ese momento.
Sobre el caso que involucró a Eduardo Duhalde, reiteró que “Ginés decidió vacunar a un ex Presidente y envió una persona (a su casa) para que lo hiciera”, pero “se llevaron cinco frasquitos y se dio una dosis de más (al secretario del ex mandatario nacional, que no estaba en la lista) para no perderla”, lo cual “no es algo inhabitual” en este tipo de situaciones, según afirmó.
“Nosotros tenemos tres ejes de investigación (por estas irregularidades): uno es el de la Justicia, otro tiene que ver con la Procuraduría de Información Administrativa (PIA), que ha instruido un sumario, y el último es la decisión del Presidente de pedirle la renuncia a Ginés (González García) como ministro de Salud”, agregó durante su participación en el programa Podemos Hablar de Telefé.
Por otra parte, Vizzotti precisó que, ante el retraso en la llegada de las vacunas contra el coronavirus, se está “reformulando la campaña con las jurisdicciones para que (las coordinaciones) estén muy aceitadas y que ni bien llegan las dosis se apliquen”.
“El mundo esperaba más dosis porque los contratos que se firmaron eran teóricos, dependían de la producción, y el paso a la práctica fue bastante más dificultoso de lo que se esperaba en los laboratorios”, señaló.
También reconoció que “no se hicieron testeos masivos” en la Argentina, pero aclaró que “no significa que esa sea la estrategia (correcta) porque hubo países que testearon muchísimos y que tuvieron un exceso de mortalidad”.
Además, recordó que el Gobierno ya “tiene comprometida la compra de un total de 65 millones de vacunas” de diferentes laboratorios, pero ratificó que las mismas van a ir arribando “a medida que se logre aumentar la producción, pero eso todavía no sucedió en el mundo”.
Al respecto, precisó que hay 2 millones de dosis de Sinopharm que enviarán a buscar cuando China lo autorice´, más otras 900 mil de Astrazeneca que estarán llegando de Estados Unidos próximamente, además de que se van a “seguir recibiendo embarques de Rusia” y hay otras 9 millones de inmunizantes correspondiente al mecanismo COVAX, de las cuales este mes ”tienen que empezar a entregar” una nueva partida.
Por último, Vizzotti contó cómo se enteró de que Alberto Fernández se había contagiado de coronavirus, a pesar de haber recibido las dos inyecciones de la Sputnik V: “Me llamó ese mismo día para contarme que tenía una cefalea muy leve, pero como tenía el compromiso de varias reuniones quería estar seguro y esa noche se hizo el test de antígeno que dio positivo. Yo sé que eso puede pasar, teníamos la tranquilidad de que seguramente la iba a cursar de manera tranquila (a la enfermedad). La verdad es que el 0,15% de las personas que se vacunaron dieron positivo en la Argentina”, cerró.