El problema de desabasto de medicamentos para pacientes con VIH/Sida ya estalló, luego de que el Gobierno Federal no ordenó a tiempo las compras con el argumento de que está evitando la corrupción.
Según el noticiario Despierta Con Loret, casi 100 mil vidas dependen de ese suministro y toda la lucha contra la epidemia está en riesgo por la suspensión de fondos a las organizaciones civiles que trabajan con los grupos vulnerables.
Roban antirretrovirales
Ante el problema del desabastecimiento los integrantes del Movimiento Nacional de Lucha contra el SIDA/VIH bloquearon ambos carriles de Avenida Reforma, a la altura de la Estela de luz, frente a las instalaciones de la Secretaría de Salud: acusaron a las autoridades de negar un desabasto en medicamentos y de poner en riesgo muchas vidas.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) denunció el robo de medicamentos controlados del Hospital General número 29 en la colonia San Juan de Aragón, en la Gustavo A. Madero: Son 191 piezas de 14 medicamentos diferentes, entre ellos antirretrovirales para el tratamiento del VIH.
Se calcula que el monto del robo asciende a más de 465 mil pesos.
Llegó el desabasto de medicinas
A pesar de que el Gobierno Federal lo niega la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dictó medidas cautelares para que la Secretaría de Hacienda ordene la compra de medicamentos.
El gobierno Federal suspendió la entrega de fondos a las organizaciones civiles que atienden el tema, y al modificar los mecanismos para la compra de los medicamentos antirretrovirales generó un desabasto que se agrava.
«Usualmente se compra en marzo lo de todo el año y están comprando solo un porcentaje del medicamento», mencionó Carlos García de León, Consultor Especializado en temas de VIH.
A partir de este año la compra de antirretrovirales pasó de la Secretaría de Salud a la de Hacienda con el argumento de combatir la corrupción. Sin embargo, la compra no se ha hecho y algunos pacientes han dejado de recibir sus tratamientos.
«El problema es que si alguien falla al tratamiento, si alguien tiene que ser hospitalizado el seguro popular no cubre ni las hospitalizaciones, ni los medicamentos para enfermedades oportunistas«, afirmó Luis Adrián Quiroz, quien es derechohabiente viviendo con VIH/SIDA del IMSS.
Mientras que Raquel Buenrostro, Oficial Mayor de la Secretaría de Hacienda mencionó que buscan «que nuestro dinero valga más. Porque nuestro objetivo es llevar medicamento gratuito a una amplia población que es muchísimo más de lo que se está cubriendo en este momento«.
«Hoy, mes de abril no tenemos garantizada la compra de medicamentos, es decir, que la secretaria de salud y el Estado Mexicano Nos mintió«, dijo Luis Adrián Quiroz. Aunque el gobierno aseguró semanas atrás que no habría desabasto.
En cuanto al plan de la compra de medicamentos Carlos Magis, Director de Atención Integral de CENSIDA, informó que «Nuestro primer medicamento se acaba el 12 de mayo, nosotros vamos a salir a la comprar«
En cinco estados de la república han comenzado a cambiar los tratamientos, en Tamaulipas cientos de personas han dejado de recibir medicamentos. Ana Karen que teme del desabasto le da miedo que ésta situación deteriore su salud a corto plazo.
«No tenemos medicamento antirretroviral desde hace algunos meses y es una situación que estamos pasando y es una situación crítica», mencionó Ana Karen.
El Doctor Tirso Clemades, Médico Especializado en VIH, aseguró que cambiar los medicamentos de un paciente seropositivo tiene consecuencias graves.
«Puede alterar la carga viral, puede alterar el conteo de CD4, puede alterar la adherencia del paciente, puede provocar efectos adversos a largo plazo«, dijo el Médico Tirso Clemades.
De igual forma se mencionó que el Comité que permitía estas compras por situación de emergencia o desabasto ya lo disolvieron. Por lo cual algunos piensan pelear por defender sus derechos a tal grado de tomar las calles y alzar, nuevamente, la voz.
Hasta el 2018 el presupuesto anual para las organizaciones de la sociedad civil era de aproximadamente 100 millones de pesos, este año no saben si van a recibir fondos y el Gobierno sigue sin definir.
Aumenta el número de infección
El número de personas infectadas va en aumento y esto es por la falta de protección ante la pareja que no tienen idea que tiene VIH, es por ello hacerse chequeos constantes para detectar a tiempo la enfermedad.
A diferencia de los que saben su estatus de VIH, quienes utilizan métodos preventivos que permiten romper la cadena de transmisión.
La sociedad civil con ayuda del financiamiento público apoya y ayuda a la población que tiene el mayor riesgo de contagio de alguna enfermedad de transmisión sexual: reclusos, usuarios de droga inyectables, trabajadoras y trabajadores sexuales.
Evitar un contagio le cuesta anualmente 17 mil pesos al Estado mexicano, pero si esto no sucede hay que brindarle medicamento a la persona, por lo menos 20 años, la sobrevida actual para una persona que tiene VIH.
¿Qué es el PrEP?
Alexander Moreno, fundador de la asociación Living PrEP A.C. dijo que el PrEP es un método preventivo, relativamente desconocido en México que evita la transmisión de VIH.
El PrEP deriva de Profilaxis preexposición y lo puede tomar una persona que no tiene VIH «tiene certeza de que no va a adquirir la infección, aunque tenga relaciones múltiples con muchas parejas y no use protección«.
El Prep es una pastilla que se debe de tomar diariamente para evita que cualquier vestigio de VIH permanezca en el cuerpo humano.
«Es más fácil que no falle el Prep de que solo se toma una pastilla», afirmó Carlos García de León, Consultor Especializado en temas de VIH.
En cuanto a su conocimiento de la pastilla Fernando Moreno, participante del protocolo del PrEP dijo que «El 99% de los mexicanos no tiene la más remota idea de lo que es PrEP y para qué sirve«.
En 2012 fue aprobado por la FDA, el organismo que regula los medicamentos en Estados Unidos y de acuerdo con sus estadísticas, de las más de 380 mil personas que participan en el mundo, en este programa, solo 7 han adquirido VIH.
Desde el 2016 el Gobierno Mexicano lleva un protocolo de investigación en el que participan 3500 personas y se esperaban más personas para una segunda etapa, pero la burocracia lo ha limitado.
Fuente: Infobae