Los rugbiers que fueron condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa no la están pasando nada bien en la cárcel de Melchor Romero.
“Están re calientes y encima no tienen plata. Ellos tienen sólo tres horas autorizadas para salir al patio, porque no los cruzan con los otros presos. Están ellos solos. Hubo una pelea. Se empezaron a putear y se fueron a las manos. La ligó Thomsen y uno le gritó que los hundió a todos. La pelea aceleró el traslado de Matías Benicelli”, publicó el portal BigBangNews.
“La decisión de que Benicelli abandone Melchor Romero y sea transferido al penal de Campana se tomó el lunes, después de que las autoridades judiciales fueron notificadas de la pelea que tuvo lugar en el patio. El próximo en seguir sus pasos sería Ciro Pertossi, quien al igual que Benicelli fue condenado a perpetua y también sería alojado en las próximas horas en Campana”, agregaron.
“Son conscientes de que con otro abogado y otra defensa las penas hubieran sido distintas. Saben que es momento de despegarse ahora y, por fuera de la formalidad del cambio de abogados, eso genera una fractura en el grupo que durante los últimos tres años se mantuvo, incluso pese a la condena social”, remarcaron.
El propio Cinalli reconoció en diálogo con el periodista Cristian “Eche” Echeverría que las peleas se incrementaron después de la lectura del veredicto en Dolores y que el grupo sufrió entonces su primera división: Viollaz, Cinalli y Lucas Pertossi por un lado; Benicelli, Thomsen, Comelli y los hermanos Luciano y Ciro Pertossi por el otro.
El Tribuno