El vocero de la Suprema Corte de Justicia, Raúl Oxandabarat, reconocía que «hay que reorientar el sentido de la investigación» por el crimen de Lola Chomnalez porque la pesquisa está «estancada». Y así fue. Hoy se conoció que las autoridades tienen en la mira de dos nuevos sospechosos, uno de los cuales fue arrestado. Ambos serán indagados mañana junto a otras dos personas.
El primero de los sospechosos que deberá declarar es una persona de 35 años que fue detenida hoy. Distintas fuentes lo definieron como un «artesano» o un «linyera» y viviría en un asentamiento en la localidad de Castillo, donde hubo una serie de allanamientos.
El portal Subrayado informó que el detenido es una persona que hasta ahora no había sido investigada, pero cuya figura fue ubicada cerca de la escena del crimen por más de un testigo. La magistrada intentará determinar si tenía algún tipo de vínculo con la víctima.
También está en la mira de las autoridades un changarín de 50 años que vive en Rocha y cuyo hijo de 14 años halló el cuerpo de Lola en una zona de difícil acceso. Una fuente de la investigación asegura que su testimonio «no cerró» a la jueza López.
Al parecer, el sospechoso relató que el cadáver fue encontrado luego de seguir una serie de pisadas en la arena, pero poco antes del hallazgo hubo un temporal de viento y lluvia que debería haber borrado cualquier huella.
Otro punto extrañó a las autoridades. «Nos llamó la atención que sólo se veía el borde de su short. No había otros elementos que indicaran la presencia del cuerpo. Si no hubiésemos sabido que allí había un cuerpo, hubiese pasado desapercibido», explicó el perito Rubén Castro.
El vocero judicial informó a El Observador que las otras dos personas que serán puestas frente a la jueza López son un conocido del detenido y una ciudadana francesa, aunque no trascendió los motivos por los que deberán declarar.
