La óptima recuperación de Edinson Cavani y Marcos Rojo es una cuestión primordial para el cuerpo técnico encabezado por Diego Martínez. El Xeneize tendrá en 10 días uno de los compromisos más importantes del semestre y la primera prueba de fuego para el entrenador: el Superclásico contra River en el Monumental. Con vistas a volver rápidamente al campo de juego, ambos futbolistas se incorporaron nuevamente al grupo y se entrenaron a la par del resto de los dirigidos por el ex-Tigre.
El capitán xeneize es que el que más tiempo arrastra su lesión muscular. Se desgarró el gemelo de la pierna izquierda durante el primer amistoso formal de la pretemporada, ante Gimnasia y Tiro en Salta. Todavía no pudo regresar al verde césped, por lo que el DT se inclinó por la dupla Cristian Lema – Nicolás Figal.
Si bien el platense volverá a portar la cinta de capitán que hoy custodia Chiquito Romero, el entrenador deberá decidir si saca a alguno de los dos centrales, que vienen con la flecha para arriba. Boca lo necesita: Rojo apenas jugó el 36 por ciento de los minutos totales que disputó el Xeneize desde su arribo.
Por su parte, el Matador terminó de recuperarse de una fuerte contractura muscular que padeció luego de aquella tarde compleja en el Nuevo Gasómetro contra Sarmiento. Para acompañar a Miguel Merentiel, en su lugar Martínez rotó a Darío Benedetto, Luca Langoni y Kevin Zenón, que actuó de un segunda punta en el partido ante Central Córdoba, en el que convirtió su primer gol con la camiseta azul y oro. También será trabajo del DT decidir si se inclina por el delantero uruguayo de cara al Súper.
Con las cartas sobre la mesa, la idea del CT es convocar a ambos referentes al compromiso de este domingo, a las 21:30 horas, frente a Lanús en La Fortaleza del Sur del Conurbano. En la siguiente jornada, Boca enfrentará a River, por lo que el plan es que los dos estén en plenitud física para el encuentro del semestre.
Fuente: tyc sports