En el entorno del presidente Alberto Fernández trabajan para lograr un encuentro con Cristina Kirchner y comenzar entonces a definir la estrategia electoral del Frente de Todos, pero desde las oficinas del Instituto Patria la respuesta fue tajante: no habrá reunión hasta que el mandatario desista de su idea de ir a una PASO.
Cristina Kirchner no quiere que el espacio vaya a internas, sino que busca imponer sus condiciones y que el jefe de Estado se rinda. De esta manera la Vice pregona por la idea de un candidato de consenso que encolumne a todo el espacio detrás de su candidatura.
Ese postulante es el ministro de Economía Sergio Massa, que para Cristina Kirchner es el mejor candidato que tiene el oficialismo. “Tiene un caudal electoral superior a otros”, repiten cerca de la Vice.
En el Senado y el Instituto Patria ronda por estas horas una versión de que el kirchnerismo podría no oponerse a las PASO. Incluso el propio senador Oscar Parrilli, muy cercano a la Vice, dijo que “nadie va a impedir que haya internas”. Pero Cristina Kirchner está decidida y quiere elegir con el dedo a su postulante a la Presidencia.
Es que a pesar de la grave crisis económica con alta inflación y nulas reservas, el ministro logró colocarse como el postulante más potable del espacio. Esta idea de señalar con el dedo a Massa es lo que irrita a Alberto Fernández, que pidió “darle la lapicera a la militancia”. Además del presidente, otros dirigentes como el embajador argentino en Brasil Daniel Scioli piden que el candidato se dirima en una competencia interna.
La candidatura de Massa está atada a la estabilidad económica, la que a su vez depende de que el Fondo Monetario Internacional emita los desembolsos correspondientes para traer calma cambiaria. El ministro necesita, a su vez, contener la fuerte suba de la inflación, ya que el país puede quedar al borde de una hiperinflación.
En caso de que el contexto económico no le permita a Massa llegar con chances electorales, Daniel Scioli es la segunda opción de Cristina Kirchner para la presidencia. Pocos días atrás, el embajador argentino en Brasil presionó para que el Frente de Todos vaya a internas al asegurar: “Lo tengo merecido”.
En su última aparición en La Plata, la Vicepresidenta subió al ring a Javier Milei. Cuestionó la dolarización y el endeudamiento y dijo que el país ya fue “víctima” de esas prácticas. La Vice quiere polarizar con el libertario porque cree que en un eventual balotaje el Frente de Todos puede ganar. A su vez, cree que en una eventual derrota, luego el kirchenrismo puede regresar al poder en 2027.
El Frente de Todos debe llegar con un panorama más claro al 16 de mayo, cuando se realice el Congreso del PJ en el que se deberán fijar las alianzas partidiarias. De aquí hasta ese fecha la discusión pasará por si el Frente de Todos presenta un candidato único o todo se dirime en las PASO.
Fuente: tn
