Al rededor de las islas San Ambrosio y San Félix (conocidas como Desventuradas), a casi 900 kilómetros de la costa chilena sobre el Pacífico, se creará el parque marino más grande de América. El 72% de los peces que habitan en la zona protegida, y el 40% de las llamadas especies profundas e invertebrados, sólo se encuentran allí. Entre ellas, hay langostas de hasta ocho kilos de peso y bosques de algas únicos.
El parque marino Nazca-Desventuradas tiene 300.035 kilómetros cuadrados, y su creación fue decretada por el gobierno de Michelle Bachelet. Enormes atunes, vidriolas y tiburones de aguas profundas también componen el paisaje natural que Chile suma a sus áreas protegidas en el mar, que suman un total de 450 mil kilómetros cuadrados.
Con el nuevo parque, el 12% de la superficie marina quedará protegida. «Es un tremendo desafío y un reconocimiento al patrimonio natural que tiene Chile, que debe incrementar su conocimiento y resguardarlo para las futuras generaciones», dijo el ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, en declaraciones al diario chileno La Tercera.
Sin embargo, no todas las voces son de aprobación irrestricta al nuevo parque. Si bien destaca que es importante que se generen áreas protegidas, Miriam Fernández, directora del Centro de Conservación Marina de la Universidad Católica de Chile, pone reparos. «El compromiso de Chile no puede basarse en crear estas mega-áreas lo más lejos de los conflictos posible, porque necesitamos acciones de conservación en el continente y necesitamos que la ciudadanía, los pescadores, vean que la conservación no es algo negativo, que pueden tener beneficios directos», enfatiza la experta del Centro de Conservación Marina de la Universidad Católica», dijo Fernández.
«En Chile han evitado hacer áreas de conservación importantes en zonas donde hay gente, necesidades y conflictos de uso. Entonces, es súper positivo, pero en algún momento tiene que llegar a los lugares donde hay gente, a cubrir todos los ecosistemas relevantes en Chile», subrayó la investigadora.
Bachelet había anticipado la creación del parque en octubre del año pasado. En el origen está el descubrimiento científico, en 2013, de una enorme biodiversidad en la zona.
La Isla de Pascua también es un objetivo chileno a la hora de conservar el ecosistema marino. Allí podría crearse un nuevo parque.
La Nación