Claudio «Chiqui» Tapia consideró como un atropello contra la vida institucional de la AFA y los clubes la decisión del gobierno nacional de enviar dos veedores de la Inspección General de Justicia debido a las irregularidades administrativas advertidas, en consecuencia de lo cual se suspendió la elección programada para el 30/6.
El dirigente que preside el club Barracas Central, que se desempeña como vice segundo de la AFA y que es junto a Hugo Moyano uno de los dos candidatos que ya presentó sus avales para postularse a la presidencia del organismo, apuntó sobre la notificación de la IGJ: «No comparto la decisión, carente de fundamentos, de la IGJ que ordenó suspender las elecciones de AFA dispuestas para el 30/6».
La noticia fue recibida con sorpresa en una AFA resquebrajada institucionalmente pero apuntada formalmente desde junio de 2014 cuando la legisladora Graciela Ocaña presentó una denuncia por «clara malversación» en el manejo de los fondos públicos asignados al programa Fútbol Para Todos.
La denuncia fue luego impulsada por el fiscal Eduardo Taiano en el marco de la «presunta comisión de delitos» por parte de altos funcionarios del kirchnerismo y dirigentes del fútbol argentino como el ex Jefe de Gabinete Jorge Capitanich, el ex presidente de la AFA Julio Grondona (ya fallecido), el entonces embajador ante el Mercosur Juan Manuel Abal Medina y el ex senador Aníbal Fernández, entre otros.
El caso quedó bajo el dominio de la jueza federal María Servini de Cubría, quien realizó un duro informe al respecto. En uno de sus pasajes, advierte sobre una «precaria situación institucional» de la AFA y en el que el gobierno nacional se basó para enviar a los veedores Luis Tozzo (abogado) y Catalina Dembitzky (contadora), para analizar la situación del organismo y en este marco suspender las elecciones del 30 de junio por 90 días con opción a 90 más.
