Los cultivos de coca se redujeron ligeramente en Colombia en 2018 al pasar de 171.000 hectáreas a 169.000 pero siguen en sus cifras más altas desde que comenzaron a calcularse, según datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) divulgados este viernes.
En una declaración en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, el representante de la UNODC en Colombia, Pierre Lapaque, mostró su satisfacción por que se haya frenado el crecimiento de estos sembradíos pero aseveró que «es necesario mencionar que Colombia aún está en los niveles de cultivo de coca más altos de toda la serie histórica que se inicio en 2001″.
«También es necesario mencionar que los cultivos de coca están cada vez más concentrados. En 2018, el 62 % de la coca estaba en el 5 % del territorio afectado», agregó Lapaque.
Lapaque también valoró que la tendencia de crecimiento de los cultivos que se inició en 2014 «se haya interrumpido», lo cual se debe a «un efecto de compensación».
«La situación de estabilidad se debe a un efecto de compensación, la coca se redujo en nueve departamentos pero los incrementos en Norte de Santander, Bolívar y Cauca compensaron esta reducción», añadió.
Frente a ello, el representante de la UNODC considera que esta situación requiere que el problema sea atendido desde «diversas aproximaciones».
«Es importante seguir consolidando escenarios propicios para la legalidad y el desarrollo, y desarticular y expulsar a los grupos dedicados al narcotráficos de estos territorios», apostilló.
Al respecto, el presidente colombiano, Iván Duque, aseguró que cuando llegó a la Presidencia el pasado 7 de agosto el país tenía una tendencia de crecimiento de los cultivos de coca superior al 30 % por año.
«Este reporte muestra que por primera vez en prácticamente siete años se quebró esa tendencia de crecimiento exponencial. No solamente paró, sino que se registra también un descenso en el área sembrada cercano al 1,2 %», añadió Duque.
También valoró la «política de carácter integral» del Gobierno para enfrentar este problema, que incluye la sustitución, la erradicación, el desarrollo alternativo y el pago por servicios ambientales, entre otros.
«Aquí hay un camino que se abre para seguir fortaleciendo el trabajo con UNODC y que esta política se afiance como una política de Estado», señaló Duque.
En junio pasado, la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca (Ondcp, por su siglas en inglés) divulgó un informe según el cual las hectáreas de coca sembradas en Colombia tuvieron un ligero descenso del 0,5 % el año pasado al pasar de 209.000 a 208.000.
Con información de EFE
Fuente: Infobae