Con una noche cargada de emociones los bandeños celebraron los 104 años de su ciudad

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Con un imponente festejo, en la tradicional esquina de Besares y Belgrano, el 104º Aniversario de la Ciudad de La Banda tuvo un emotivo broche de oro con la presentación de Los Manseros Santiagueños y un sentido homenaje a Guillermo «Fatiga» Reynoso.

La fiesta comenzó pasadas las 21 con un desfile de artistas que le pusieron ritmo a la noche esperada por todos los bandeños para homenajear a esta Cuna de Poetas y Cantores.

La sorpresa la dio Florencia Paz quien durante su presentación invitó a su padre Onofre a interpretar una chacarera.  Fue así que el mansero accedió y se llevó la primera ovación del público.

Minutos después se presentaban los Manseros Santiagueños ante la expectativa de su público que esperaba el merecido homenaje al querido Guillermo «Fatiga» Reynoso.

Comenzaron a sonar los primeros acordes de sus ya tradicionales temas que fueron coreados a viva voz por el público. No obstante, el Negro Paz expresó: «Hoy nos está faltando un jugador, no quiero hablar mucho porque se me hace un nudo en la garganta, simplemente quería decir que Fatiga llevaba 45 años en el grupo, éramos una verdadera familia».

Posteriormente invitó a los hijos del extinto vidalero a compartir el escenario, «vení Hugo así toques el bombo», dijo el fundador de Los Manseros.

Hugo Reynoso estuvo acompañado por su hermana Verónica, quien se mostró emocionada por la muestra de cariño hacia su padre.

Hugo Reynoso.
Hugo Reynoso.

El momento fue aprovechado por el intendente Pablo Mirolo quien en nombre de toda la ciudad entregó un reconocimiento a los hijos de Reynoso.

A su vez Hugo Reynoso regaló al jefe comunal, «el último bombo que utilizó mi papá».

Pese a la ausencia de Fatiga, Los Manseros hicieron emocionar a las miles de almas que se congregaron y recibieron una cerrada ovación.

El show continuó con la presentación de Cuti y Roberto Carabajal quienes regresaron al escenario Domingo Bravo para presentar su último disco «Con la guitarra en la espalda».

También actuó el violinero de todos los tiempos, Néstor Garnica quien presentó un show impecable. El talentoso bandeño hizo bailar a todos los presentes al ritmo de sus chacareras, zambas y huaynos.

Más tarde llegaría Marcelo Toledo. El cantautor desplegó su amplio repertorio y como no podía ser de otra manera se retiró ovacionado.

Otro momento sublime se vivió con Sergio Galleguillo, el riojano llegó a La Banda para celebrar sus 104 años de vida institucional.

Los bandeños dieron riendas sueltas a la algarabía y en pleno invierno se animaron a jugar al carnaval al ritmo de la Chaya riojana.

Con sus clásicas canciones Galleguillo renovó su idilio con el público de La Banda, y se despidió a todo ritmo.

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