Una profesora del Reino Unido fue condenada por abusar sexualmente de un alumno de 15 años, a quien se pudo comprobar que le mandó miles de mensajes sexuales.
Ellen Cadman-Smith, de 24 años, le envió 3.000 mensajes de texto al joven de 15 años en solo dos meses, incluido uno en el que le dijo: “Creo que me estoy enamorando”.
En las conversaciones que Cadman-Smith, que tiene un hijo de un año, mantuvo con el adolescente, le dijo que “lo deseaba tanto” que se estaba volviendo “loca” y que pensaba en él “sin parar”.
En otra oportunidad la docente le escribió que estaba “medio desnuda” y agregó: “No puedo tenerte y sabes porqué”.
Fue la madre del adolescente la que descubrió los mensajes subidos de tono. La maestra estaba guardada entre los contactos como “E”. Según la investigación, la docente se juntaba con el chico en su auto e incluso fueron varias veces a un restaurante de comidas rápidas.
Según indicó el sitio LBC, Cadman-Smith sufre de “ansiedad extrema” y otros problemas psicológicos, lo que significa que no se la consideró mentalmente apta para ser juzgada, por lo que fue sometida a un “juicio de emisión”, en el que solo se analiza si el acto ocurrió.
El tribunal consideró que Cadman-Smith mantuvo “comunicación sexual con un menor” por lo que la jueza Susan Evans KC le impuso una orden de prevención de daños sexuales de cinco años.
De este modo, se determinó que la docente no podrá usar sus redes sociales para contactar a chicos menores de 16 años. Además, sus dispositivos electrónicos deberán estar siempre disponibles para inspección y no puede borrar su historial de búsqueda.
De igual modo, Cadman-Smith también será incluida en el Registro de Delincuentes Sexuales durante cinco años y se le prohibirá trabajar con niños.
La jueza declaró: “Está claro que hubo actividad sexual entre ellos. Ella estaba en una posición de responsabilidad. Fue un abuso de confianza. Claramente sabía que estaba mal hacer lo que estaba haciendo. Fue un gran error”.
La trabajadora de la escuela se negó a disculparse cuando el diario The Sun la confrontó en su casa en Sandown. Cuando se le preguntó si quería pedir perdón, miró a su prometido Dean May, quien estaba con ella en ese momento y dijo a los periodistas: “Nunca habrá una disculpa».
Fuente: tn