Además de los incendios que se registran en la Patagonia desde hace días, dos focos activos avanzan sobre la provincia de Corrientes. Uno de ellos es “muy peligroso” y las autoridades se vieron obligadas a cortar una ruta.
Actualmente, en la provincia se encuentran dos grandes focos activos. El primero, de mayor magnitud y peligrosidad, se ubica en la Ruta Nacional 14, cerca de la ciudad de Bonpland. De acuerdo con la información del medio local El Libertador, el coordinador de Comando Operativo de Emergencias de la provincia de Corrientes, Bruno Lovinson, precisó que el punto ígneo arrancó “en la zona de campos, se metió en una forestación y tiene mucha magnitud”.

La cercanía de las llamas a la calzada de la Ruta 14 obligó a las autoridades a cortar la circulación como medida preventiva. En ese sentido, adelantó que “es un incendio que va a demandar muchas horas de trabajo para poder contenerlo”.
En el lugar, trabajan bomberos, brigadas de incendios forestales y un avión del Sistema Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), con el cual los especialistas pueden hacer un reconocimiento del terreno. “Está lejos de ser controlado, así que todavía va a demandar bastantes horas de trabajo”, agregó.
Otras zonas que fueron afectadas durante la semana pasada. Entre ellas, Curuzú Cuatiá, Mercedes, Perugorría y Villa Olivari. Las llamas avanzaron con rapidez debido a los fuertes vientos y las altas temperaturas características del verano en la región, mientras el material combustible facilitó su expansión.

El sábado por la tarde los trabajos se focalizaron en Colonia Liebig, Ita Pucú (Mercedes), Ayuí Grande, Perugorría y María Chica (Curuzú Cuatiá). Mientras tanto, las causas de los incendios aún no han sido determinadas, aunque es común que se originen de manera intencional o por descuidos humanos. En el recuerdo persiste la temporada 2020-2021, cuando el fuego arrasó un millón de hectáreas de campos y humedales.
En un diálogo con Infobae, Lovinson precisó que “la situación es complicada por la meteorología”, ya que la región enfrenta una sequía significativa, temperaturas diarias que rondan los 38 grados y fuertes vientos, factores que favorecen la propagación del fuego.
Carlos Roldán, presidente de la Sociedad Rural de Mercedes, informó que el fuego ha arrasado entre 20.000 y 25.000 hectáreas en los últimos diez días, en un escenario similar al de Curuzú Cuatiá, donde ya se habrían quemado unas 25.000 hectáreas en febrero, según Daniel Panario, titular de la Sociedad Rural local.
Panario calificó la situación como “desesperante” en declaraciones a Canal 5TV y recordó que tanto el INTA como los servicios meteorológicos habían advertido sobre el riesgo de incendios.
Desde Perugorría, Carina Tomasella, presidenta de la Asociación Rural, describió el panorama como “un infierno” y alertó sobre la falta de lluvias significativas en los últimos tres meses, lo que ha agravado la crisis.
Fuente Infobae