Empresarios, artistas, investigadores, científicos y medios de comunicación de Francia multiplicaron este martes sus llamados a votar contra la ultraderechista Marine Le Pen en el balotaje presidencial del domingo próximo, en medio de temores a que un alto abstencionismo potencie su desempeño a tal punto que pueda ganar.
Un eventual triunfo de Le Pen sobre el liberal Emmanuel Macron desvela a gran parte de Francia y Europa, dadas sus posturas populistas, nacionalistas, anti Unión Europea (UE) e islamófobas, que muchos consideran una afrenta a los valores republicanos de su país y un peligro para la quinta economía mundial.
El miedo a la abstención
Este martes, el diario católico La Croix se posicionó a favor del joven centrista, de 39 años, siguiendo los pasos de varios rotativos nacionales. ‘Frente al riesgo que representa Marine Le Pen, la abstención no basta’, afirmó La Croix.
Según las encuestas, que vaticinan todas la victoria de Macron, la abstención en el balotaje del domingo podría alcanzar al 30% del electorado, una cifra muy superior a la de anteriores comicios presidenciales, con excepción de los de 1969 (31,1%).
Abstenerse «equivale a dar la mitad de su voto a Marine Le Pen, en la elección más emblemática en Francia en las últimas décadas», apuntó este martes el matemático Cédric Villani en una columna de opinión publicada en el diario Libération, en la que pidió votar por Macron.
El grupo empresario
También este martes, ejecutivos de empresas líderes de Francia hicieron a un lado su tradicional renuencia a hablar públicamente sobre política y apoyaron abiertamente a Macron, que fue el más votado en la primera vuelta, para el segundo turno del domingo.
En comunicados publicados en el diario de negocios Les Echos, CEOs de 13 compañías -incluyendo a cinco que forman el principal índice bursátil francés, el CAC 40, dijeron que las políticas económicas nacionalistas de Le Pen, líder del Frante Nacional (FN), dañarán severamente a Francia.
El plan de la ultraderechista de reintroducir el franco como moneda de Francia en reemplazo del euro «sería catastrófico para las compañías y los habitantes franceses», escribió Antoine Frérot, CEO del grupo de servicios públicos Veolia Environnement SA.
“El programa del Frente Nacional constituiría un riesgo para la estabilidad política de nuestro país», agregó.
El mismo partido tomaron CEOs de otras grupos empresariales líderes, como Michelin, Leclerc, Bouygues, Atos o Vente-Privee.com SA, que hicieron advertencias similares sobre los peligros de que gane Le Pen.
El mundo de la cultura
El mundo de la cultura también se ha pronunciado. Los cineastas Mathieu Kassovitz y Luc Besson, el director del célebre festival de Avignon, Olivier Py, el Nobel de Literatura Jean-Marie Le Clézio, pero también cantantes, cómicos y dibujantes han llamado a los electores a derrotar a la ultraderecha.
Este martes, un total de 103 cineastas franceses publicaron un manifiesto en el sitio web del diario digital The Huffington Post en el que se declararon «comprometidos contra el FN y su ideología mortífera que amenaza las artes y a Francia».
Entre los firmantes destacan Patrice Leconte, Costa Gavras o Bertrand Tavernier, entre otros.
Personalidades del deporte
Tampoco quedó afuera el mundo del deporte, donde el icono del fútbol francés, Zinédine Zidane, llamó a «evitar al máximo» al FN, lo que propició una respuesta y críticas de Le Pen.
Estas voces se suman a las de responsables políticos, sindicales y religiosos -con excepción de la Iglesia Católica- que apenas se conocieron los resultados de la primera vuelta el pasado 23 de abril llamaron todos a optar por Macron.
Su rival intenta, no obstante, seducir a los electores decepcionados.
El efecto contraproducente
Una parte de los votantes del conservador Francois Fillon (20,01%) no quieren ni escuchar hablar del candidato centrista, a quien muchos ven como el heredero del presidente saliente, Francois Hollande, ya que fue junto a él como Macron dio sus primeros pasos en la política.
En este contexto, después de la victoria de Donald Trump en Estados Unidos y del Brexit en Reino Unido, que ningún sondeo supo predecir, algunos temen que estos llamados tengan un efecto contraproducente.
«Podrían ser un arma de doble filo», advirtió Les Echos, que recordó que en Estados Unidos los llamados del mundo de la cultura a favor de la demócrata Hillary Clinton exacerbaron el sentimiento de rechazo de las clases populares.
Le Pen, de 48 años, se presenta como la candidata del pueblo contra el ‘sistema’, las ‘élites’, y la ‘oligarquía’.
Por primera vez en la historia del partido, el FN recibió el apoyo de un candidato de otro partido político, el soberanista Nicolas Dupont-Aignan (quien obtuvo el 4,70% de los sufragios en la primera vuelta), quien se convertiría en su primer ministro si es elegida.
Ambos compartieron el lunes el escenario en su gran acto entre las dos vueltas en un suburbio parisino, ante miles de personas.
El discurso de Le Pen, en el que plagió al menos cuatro pasajes de un discurso pronunciado 15 días antes por el conservador Fillon, ha dado mucho que hablar este martes, justo antes del único debate entre los candidatos, previsto para mañana.
Sin sonrojarse, la candidata ultraderechista justificó el plagio como «un guiño» a los electores de la derecha.
«Asumo totalmente ese guiño», dijo en una entrevista al canal televisivo TF1.
El discurso copiado por Le Pen abordaba la identidad francesa y para la candidata ultraderechista la repercusión que ha tenido es positiva.
«Es cierto que tenemos la misma visión de Francia con los electores de Francois Fillon, de su grandeza, de su papel en el mundo», comentó la dirigente eurófoba.
Fuente: Telam