Cristina Kirchner participó este jueves del cierre de un congreso del denominado «radicalismo popular», liderado por Leopoldo Moreau, que se realizó en el predio de Parque Norte, en la Ciudad. «No soy la Presidenta hoy, soy una militante más», dijo.
La mandataria dedicó buena parte de su discurso a enfatizar el valor la UCR para la historia y destacó la figura tanto de Hipólito Yrigoyen como la de Raúl Alfonsín. Sobre este último, dijo que en 1983 le hacía «acordar» a Juan Perón.
Además reconoció elementos que ese partido asimiló antes que el suyo, el peronismo, como la importancia de la democracia como factor de construcción. «No es que éramos antidemocráticos, es que éramos producto de nuestra propia historia», explicó. «Habíamos sido derrocados con apoyo de otros partidos», añadió.
«Lo que está sucediendo hoy marca que, muy lejos de estar en un fin de ciclo, estamos entrando en el comienzo de un nuevo ciclo político. Creo que el verdadero fin de ciclo político se produjo en 2001», indicó.
Cristina Kirchner, Leopoldo Moreau, y el ministro Florencio Randazzo, uno de los pocos funcionarios de primera línea que acompañaron a la mandataria en el acto.
Luego de comparar la situación actual de muchos países con la que marcó a la Argentina a comienzos del milenio, la jefa de Estado cuestionó una vez más al Fondo Monetario Internacional. «No es que el FMI nos soltó la mano, es que nunca nos tuvo de la mano, siempre nos tuvo con la pata en la cabeza a los argentinos», dijo.
También se hizo eco de la detención de quien fuera su titular, Rodrigo Rato, por lavado de dinero. «Los que venían a decirnos cómo teníamos que manejar la economía, a hablar de corrupción», lanzó.
Luego de defender su gestión y asegurar que el país «nunca estuvo tan integrado al mundo», dijo que está «harta» de «los políticos autorreferenciales, que no son capaces de reconocer los logros que se hacen y entonces mantienen divisiones artificiales».
«Algunos empresarios vienen a la política porque quieren a la Argentina atendida por sus propios dueños», agregó.
La facción de radicales que organizó está distanciada de la estructura partidaria que ratificó semanas atrás la voluntad de compartir internas con el PRO. Se presume que los encabezados por Moreau respaldarán al Frente para la Victoria en las próximas elecciones.
En Parque Norte, Cristina estuvo acompañada por el ministro del Interior, Florencio Randazzo, el secretario de la Presidencia, Eduardo De Pedro, y el diputado Andrés «Cuervo» Larroque, entre otros.
«Sin duda muchos radicales desencantados de la alianza que ha hecho un grupo de dirigentes de su partido con la derecha, acompañarán este proyecto nacional y popular de cara a las próximas elecciones», apuntó Randazzo, quien aspira a suceder a la Presidente en la Casa Rosada.
