Luego de conocerse un estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre Argentina, en el que se indica que el gasto en jubilaciones es alto y que el envejecimiento de la población amenaza el futuro del sistema, el defensor de la Tercera Edad de la Nación, Eugenio Semino, cuestionó en duros términos las conclusiones de ese trabajo.
En diálogo con Cadena 3, Semino se mostró este jueves en contra de la idea de una suba de la edad jubilatoria, porque aseguró que, en un mercado laboral que no c rea empleos, lo único que se logra con esa medida es «incrementar el mercado no registrado» debido a que los jóvenes no consiguen ingresar a puestos de trabajo formales.
«Son cuestiones bastante pueriles. Responden a visiones políticos de este tipo de organismos, que han mostrado su fracaso a través de los años. Inclusive, Argentina ha sido una muestra de esos fracasos por lo que fue la privatización del sistema jubilatorio», opinó.
«Eso fue un gran desfalco, donde el sistema privado no fue tal: fue simplemente un robo vil de los bancos, muchos de ellos argentinos, que por un mostrador más se llevaron 12 mil millones de dólares en utilidades en nueve años y medio sin pagar siquiera impuesto a las ganancias, porque el Estado era el que seguía pagando los haberes», agregó.
«Por lo tanto, me parece que aparte de esos fracasos aparecen estos personajes, que obviamente tienen mentores locales siempre, cuyos sus razonamientos no tienen asidero científico», disparó.
En ese marco, rechazó el plateo de la OCDE sobre el supuesto envejecimiento de la población en el país. «Argentina tenía una expectativa de vida de 71 años hace 25 años y hoy es de 76, es decir, envejecimos cinco años a la tasa mundial. El detalle es que Latinoamérica envejeció entre 8 y 12 años», aseguró.
«Hace 25 años, Argentina era el segundo país más envejecido de América y hoy es el séptimo detrás de Chile (80.3 años), Uruguay, Cuba, Costa Rica, Panamá y México, y nos han alcanzado países como Ecuador y Perú, que estaban 10 o 12 años abajo», continuó.
«¿Qué muestra esto? Que en los últimos 25 años han fracasado todas las políticas de seguridad social: hablamos de trabajo y previsión, salud y educación. Tenemos un problema estructural en estos tres pilares», reflexionó.
Por otra parte, explicó cómo se financia el sistema previsional argentino y los desafíos que enfrenta. «El financiamiento hoy es mixto: la mitad proviene del trabajo (aportes y contribuciones) y la otra, de impuestos», indicó.
«De la mitad del trabajo, tenemos un 35 por ciento del empleo no registrado o en negro, que no aporta nada. Primer problema a resolver. Del financiamiento que viene de tributos, el que más plata pone mensualmente es el IVA, que es el más regresivo, con un 17 por ciento, mientras que rentas, como la financiera o minera, ponen cero. El debate a tener empieza por este lado», agregó.
