Ante esta situación, el intendente decidió pedir una licencia de 30 días en su cargo, mientras un fiscal de violencia de género de la ciudad de Paraná realizó una serie de allanamientos en el municipio. Del resultado se destaca el secuestro de un colchón que se encontraba dentro del edificio.
La investigación contra Gastiazoro comenzó la semana pasada, luego de que la empleada municipal en cuestión denunciara que había sido abusada sexualmente que padecía acoso laboral por parte del intendente.
El fiscal Leandro Dato, a cargo de la Unidad de Violencia de Género de Paraná, explicó que la denunciante “precisó en qué lugar ocurrían los abusos e hizo una descripción” de los hechos que padecía.
Tras analizar una serie de elementos, el fiscal solicitó la realización del allanamiento en el que se secuestró el colchón. Además, tomó una serie de declaraciones testimoniales a distintos empleados municipales.
Según la denuncia, la empleada dijo que años atrás recibió “insinuaciones” de índole sexual por parte de Gastiazoro, las que no respondió hasta que se convirtieron en amenazas de perder su trabajo en caso de negarse o denunciarlo.
En base a la evidencia recabada, el juez de Garantías Mauricio Mayer dictó en las últimas horas la prohibición de acercamiento de Gastiazoro a menos de 200 metros de la denunciante y su familia por 90 días.
Además, se tomaron testimonios a seis personas. Entre ellos se encontraron el secretario de Gobierno local, José María Martínez. El abogado defensor, José Barbagelata, presentará otros cuatro la próxima semana.
Por otro lado, y tras un pedido de renuncia, Gastiazoro decidió solicitar una licencia por 30 días.
Desde el 2007, Gastiazoro es intendente de Villa Urquiza, una localidad ubicada a unos 42 kilómetros de Paraná, la capital entrerriana.
El intendente enfrenta, además, otro proceso judicial con el intendente electo en las últimas elecciones, Manuel Tennen, por no brindar información pública requerida para la transición.
El Tribuno Jujuy