Varios aeropuertos fueron evacuados hoy en Francia, así como el Palacio de Versalles nuevamente, por cuestiones de seguridad, cinco días después del asesinato de un profesor en un ataque integrista.
Francia se encuentra en alerta «emergencia atentado» desde el asesinato del profesor Dominique Bernard, quien fue apuñalado el viernes pasado en la norteña ciudad de Arras. Desde entonces, se multiplicaron los avisos de bomba.
El Palacio de Versalles, una de las principales atracciones turísticas de Francia, se encontraba en curso de evacuación de nuevo este miércoles por un aviso de bomba, como ya ocurrió la víspera y el pasado sábado, informó la agencia de noticias francesa AFP, que citó a fuentes de la Policía.
La exresidencia real construida en el siglo XVII por el rey Luis XIV situada en las afueras de París, ya fue evacuada el sábado por la tarde por un aviso de bomba anónimo en el sitio moncomissariat.fr.
También hoy, seis aeropuertos fueron evacuados por «amenazas de atentados» recibidas por correo electrónico, pero no los parisinos Charles de Gaulle y Orly, indicó a la agencia de noticias otra fuente policial.
Los aeropuertos afectados son los de Lille, Lyon-Bron, Nantes, Niza, Toulouse y Beauvais, precisó esta fuente. En tanto que un vocero del aeropuerto de Estrasburgo también indicó que estaba siendo evacuado.
La Dirección General de la Aviación Civil confirmó a fines de la mañana «alertas de bombas» y evacuaciones de terminales en Lille, Lyon, Toulouse y Beauvais, sin poder dar más detalles.
En Niza, localidad del sureste, «sólo hubo una alerta de paquete sospechoso, algo habitual, que obligó a establecer un perímetro de seguridad, pero todo volvió a la normalidad», indicó el aeropuerto en su cuenta de la red social X, antes Twitter.
El organismo de vigilancia del tráfico aéreo Eurocontrol advirtió a las aerolíneas que los aeropuertos de Toulouse, Lille y Beauvais estaban «indisponibles por motivos de seguridad».
En Lille, «la terminal fue evacuada hacia las 10.30», según una portavoz, y se desviaron tres vuelos que debían aterrizar entre 11.05 y 11.40.
El Tribuno