Según la última prueba, Gustavo Lasi, el ocasional guía turístico de la quebrada San Lorenzo, es el detenido más complicado. De acuerdo con el vocero judicial, Marcelo Báez, «las muestras de semana encontradas en el cuerpo de una de las dos turistas asesinadas, corresponden a Lasi».
El cotejo de ADN se realizó en los laboratorios de la Facultad de Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires.
De acuerdo con la declaración de la joven Fernanda Cañizares, novia de Lasi, fue él quien le regaló el celular y la cámara fotográfica que pertenecían a las vícitimas, el fin de semana posterior al crimen, y señaló que desconocía su procedencia, según reveló ayer su abogado, Santiago Pedroza.
De acuerdo con la investigación llevada adelante por el juez de instrucción, Martín Pérez, Lasi activó el celular con otro chip, una hora después de la hora en la que se tomó la última foto en la cáma de las francesas y que supone, fue el momento del ataque.
Además, Lasi le pidió a su padre Walter que escondiera la carabina calibre 22, que según los peritajes, fue una de las armas que se utilizaron en el crimen de las dos turistas europeas. Estas nuevas pruebas terminan de complicar a uno de los más implicados en la causa.
Fuente: Infobae
