Donald Trump se mostró indignado ante los reportes que aseguran que el FBI abrió una investigación para determinar si es que el mandatario trabajaba en secreto para el gobierno ruso, luego del despido del ex jefe de la agencia James Comey.
Consultado por la cadena Fox News sobre el tema, indicó: «Creo que es lo más insultante que me han preguntado. Creo que es el artículo más insultante que han escrito sobre mí, y si lo lees verás que no encontraron absolutamente nada», indicó.
Según el New York Times, los investigadores debían considerar si las acciones de Trump constituían una posible amenaza para la seguridad nacional de EEUU e intentaron determinar si el mandatario estaba trabajando a sabiendas para Moscú o si, sin saberlo, había caído bajo su influencia.
Además, Trump también fue consultado por un informe del Washington Post que indicó que el mandatario hizo esfuerzos por ocultar el contenido de sus conversaciones con Vladimir Putin. Sobre la posibilidad de revelar detalles de estos encuentros, señaló: «Podría. No me importa. Tuve una conversación como hace cualquier presidente».
En ese sentido, minimizó los rumores y reiteró su postura de negar cualquier indicio de vínculos entre la campaña republicana y la injerencia rusa sobre las elecciones estadounidenses.
Cierre de gobierno
Trump volvió a amenazar con que el cierre pueda continuar de forma indefinida. En el programa Justice with Judge Jeanine, continuó su campaña para cumplir su promesa de construcción del muro en la frontera, tema que impide el acuerdo del presupuesto y obligó al «shutdown», que ya es el más largo de la historia del país.
La conductora, Jeanine Pirro, presionó a Trump sobre los motivos por los que aún no ha declarado una emergencia nacional para conseguir los fondos lograr su objetivo. El republicano señaló que está dando al Congreso la oportunidad de «actuar con responsabilidad».
El presidente señaló también que «no tiene idea» de si puede alcanzar un acuerdo con la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, que se opone a gastar dinero en un muro que considera inefectivo.
Se espera que el presidente firme esta semana la legislación aprobada por el Congreso para pagar de forma retroactiva a unos 800.000 empleados federales que no están recibiendo su salario durante el cierre parcial del gobierno. Los cheques debieron entregarse el viernes, pero muchos trabajadores recibieron talones con ceros.