Pocas personas polemizan tanto como Raúl Rizzo, un actor que se declama abiertamente kirchnerista pero que sus posturas políticas están más allá de los nombres. Entrevistado en Fannytizados por Radio Uno, comenzó hablando del panorama actual en la economía: «Está muy difícil la cosa. hay una gran recesión, hay despidos constantes de trabajadores en distintos rubros, sobre todo en las pequeñas y medianas empresas. Se han abierto las importaciones y esto atenta contra el trabajo. Los espectáculos andan en general flojos. Lo más duro es que la perspectiva para este año no va va a cambiar.»
Además calificó a la dirigencia de Cambiemos como «un gobierno neoliberal, y hemos visto como terminan: de forma desastroza. Diciembre de 2001 fue la culminación de un gobierno liberal. Soy pesimista, no veo ningún dato de la realidad que me lo modifique. Habló de inversiones, no vino ninguna inversión». Algo que lo llevó a tener, en octubre de 2016, un fuerte cruce con Nicolás Magaldi en vivo.
En un ping pong que le propuesieron los entrevistadores, habló de los grandes políticos de hoy. Sobre Elisa Carrió, disparó: «Tendría que tener una atención psiquiátrica y además habría que investigar sus relaciones con la CIA. Es un personaje muy turbio, debería ser investigado porque la mayoría de las denuncias que hizo jamás se cumplieron. ¡Jamás! De hecho, fueron para desprestigiar al otro. Creo que trabaja para alguien esa muchacha».
Sobre Sergio Massa, comentó: «No le creo nada, absolutamente nada. No sé ni donde está parado. Es un híbrido de la política. Y así le va, ha vuelto a perder adhesión de la gente. Es un gris». También opinó de Lázaro Báez: «Aparentemente tienen muchas causas de corrupción. Yo no me pongo del lado de Báez pero ya te digo…»
A lo que se refería es a lo que desarrolló anteriormente: «La corrupción está en el ADN del sistema capitalista. Y pasa hoy en día con el Gobierno que tenemos, pasa con las cuentas offshore. Pasa que este Gobierno está muy blindado por la prensa. Hay mucha gente que no está ni enterada de todo esto. Hay una cuota de cinismo en este Gobierno que ofende la inteligencia. Hay una realidad que uno vive todos los días y ellos te la pintan de otra manera. Yo te admito… no hemos salido de este sistema. En el gobierno anterior y en el actual. Por lo tanto la corrupción siempre va a estar. No hay gobierno en el mundo que se mueva en este sistema que no tenga corrupción.
A María Eugenia Vidal la calificó como «Heidi, la chica buena», y agregó: «En la provincia de Buenos Aires no ha hecho mucho. Ahora está de vacaciones mientras la gente se ahoga…»
Respecto al tema de la corrupción de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, comentó que «los medios de comunicación han jugado un rol decisivo» ya que «dicen que pasó eso, yo no tengo ninguna prueba contundente. Son los que se llenaron las manos de sangre con Papel Prensa. Hoy en día están negando la toma en los talleres gráficos de Clarín y ellos mismos está ocultando la información. Entonces de esa gente proviene la mayoría de las denuncias. ¿Me da confianza esa gente? De ninguna manera.»
«Yo voy a seguir apoyando un modelo nacional y popular. Si hay alguien que lidera un proyecto de la sociedad en su conjunto yo lo apoyo. Si se llama peronista o se llama de otra manera no me importa», confesó el actor.
También se refirió a las «latas», las producciones extranjeras que ocupan el lugar de las novelas que tradicionalmente eran nacionales. Por eso se sorprendió de este auge, y si bien dijo que siempre existieron, «no en la medida que hay hoy y nunca en espacios que eran nuestros como el de la tarde y la noche».
Mientras dispara estas polémicas, continúa trabajando como actor: en marzo se estrenará El cruce sobre el Niágara en el teatro del tinglado estrenará donde será uno de los protagonistas. Si bien aseguró que le gusta trabajar en cine y en televisión, «el teatro tiene una particularidad que es que la cosa ocurre aquí y ahora entre el actor y el espectador que es intransferible».