Según una fuente cercana a Angelina Jolie, los hijos de la actriz querían que ella se pronunciara de manera más decidida durante el largo proceso de su divorcio con Brad Pitt.
“Ha estado intentando mantener una actitud ligera tras un periodo oscuro”, indicó la fuente. “Los niños han crecido viendo que algunas personas tienen tanto poder y privilegio que sus voces no importan. Su dolor no cuenta”.
Angelina Jolie y Brad Pitt, quienes se conocieron en 2005 durante el rodaje de Sr. y Sra. Smith, estuvieron casados desde 2014 hasta que la actriz presentó la solicitud de divorcio en septiembre de 2016.
Aunque las investigaciones no resultaron en cargos en su contra, el evento marcó el inicio de un largo y complejo proceso legal.
En 2017, ambos actores firmaron un acuerdo para preservar la privacidad de sus hijos y mantener los documentos judiciales confidenciales.
Sin embargo, la custodia de los menores fue uno de los temas más polémicos y complicados.
En 2018, documentos judiciales obtenidos por People mostraron que Angelina Jolie podría haber perdido la custodia principal de los niños si no tomaba medidas para mejorar las relaciones de los hijos con su padre.
A pesar de ello, el tribunal falló en favor de una custodia compartida en 2021, aunque la sentencia fue posteriormente anulada debido a la recusación del juez privado encargado del caso.
En un comunicado emitido el 30 de diciembre de 2024, el abogado de Jolie, James Simon, afirmó que, después de ocho años, la artista finalmente encontraba algo de alivio tras la resolución de esta etapa del proceso, aunque reconoció que había sido un largo viaje hacia la “paz y la sanación” para ella y sus hijos.
La fuente cercana a la actriz añadió que, a pesar de todo el sufrimiento vivido, Angelina Jolie se siente “agotada” pero “aliviada” de que esta parte del proceso finalmente haya terminado.
El largo divorcio de Angelina Jolie y Brad Pitt
El proceso de divorcio entre Jolie y Pitt se alargó por una serie de factores complejos. La disputa por la custodia de los seis hijos de la pareja fue uno de los elementos centrales que dificultaron una pronta resolución.
La separación de bienes y la gestión de la propiedad de la finca francesa Château Miraval, en la que ambos tenían participación, también jugaron un papel fundamental en los largos y complicados litigios.
En 2021, un tribunal de apelaciones retiró al juez privado encargado del caso, John Ouderkirk, tras descubrirse un posible conflicto de interés. Esta decisión retrasó aún más la resolución, ya que se tuvo que volver a revisar la custodia.
Además, las acusaciones de abuso infantil presentadas por Jolie en 2016, a raíz del incidente en el vuelo privado, también generaron investigaciones del Departamento de Servicios para Niños y Familias de Los Ángeles y del FBI, aunque no se presentaron cargos penales contra Pitt.
La disputa por Château Miraval también contribuyó al retraso del divorcio. En 2022, Brad Pitt demandó a Angelina Jolie por la venta de su participación en la bodega a un oligarca ruso, lo que generó una nueva batalla legal ajena al proceso de divorcio, pero que complicó aún más las negociaciones.
A pesar de estos conflictos, ambas partes habían intentado en varias ocasiones resolver el caso de manera amistosa. En 2017, firmaron acuerdos para mantener la privacidad de los hijos y evitar que los detalles del divorcio fueran públicos.
No obstante, las tensiones continuaron reflejándose en las discusiones judiciales, con ambos actores manteniendo posturas firmes en cuanto a los términos de la custodia y la gestión de sus bienes compartidos.
La duración del proceso de divorcio también se debió a la sobrecarga de los tribunales de California, donde el caso se tramitaba, y a la intervención de múltiples autoridades.
Si bien la custodia compartida fue finalmente acordada, el caso de Château Miraval sigue siendo una fuente de fricción entre ambos.
Fuente Teleshow
Intenté ver una reciente película de Brad Pitt, Babylonia. Despliegue obsceno de lujo carente de gusto. Inversión multimillonaria en representar escenas con miles de extras, sobre montajes monumentales, aparatos mecánicos gigantescos, etcétera. Mostrando una vez más secuencias donde la sexualidad semeja una parodia enajenada de los menos agraciados animales (he notado tal tendencia en numerosas películas europeas, principalmente anglosajonas). No soporté mirar más del 15 por ciento de Babylonia. Creo que este filme denota el verdadero carácter de Pitt, a quien, al parecer por falsa percepción, años atrás consideraba un actor bastante elogiable.