Uno de los principales problemas que deberá enfrentar Axel Kicillof cuando asuma como gobernador de Buenos Aires será la presión de los intendentes del interior de la provincia para resolver la situación de atraso tarifario del transporte público de pasajeros.
Desde finales de 2018, cuando el gobierno nacional definió que los subsidios son potestad de los municipios y las provincias, las grandes localidades del interior no lograron compensar el alza de los costos vía subsidios y, por lo tanto, se espera un verano caliente
“El tema es bastante complejo tanto en el Conurbano como en las ciudades grandes del interior”, señalaron a Infobae desde el entorno del futuro gobernador, que ya tuvo los primeros encuentros con los empresarios dueños de las líneas de colectivos que operan en las grandes localidades de la provincia de Buenos Aires.
“Las tarifas se fueron retrasando mucho porque las autoridades municipales no autorizaban incrementos que acompañen la inflación y tampoco se cubría la diferencia con subsidios”, explicó José Andrés Vidal, gerente general de la Cámara de Transportadores por Automotor de Pasajeros del Interior Bonaerense (Catapib). “Además, sufrimos la discriminación con el Conurbano y con la ciudad de La Plata respecto de los subsidios”, agregó Vidal.
Un repaso por diferentes ciudades del interior muestra que en la mayoría de los casos los usuarios pagan valores superiores a los del conurbano. En Bahía Blanca, en donde los empresarios están solicitando un aumento superior al 30%, el boleto tiene un valor de $29,85, por lo que si se aprueba el incremento pasaría a costar 39 pesos en los próximos meses. En Tandil está en $22,29, en Olavarría $24,60. En las ciudades balnearias la previa a la temporada podría llegar con un incremento en los valores. Mar del Plata que hoy tiene una tarifa similar a la de la Ciudad, $18,50, está a punto de cambiar en forma drástica. Por esta razón, la Cámara Marplatense del Transporte Automotor de Pasajeros (Cametap), presentó un pedido a la municipalidad para que la tarifa plana aumente 63,6% y llegue a 30,27 pesos.
Aunque la gran mayoría de las empresas del interior de Buenos Aires impulsa aumentos que rondan el 30% como consecuencia del proceso inflacionario, el alza del valor del combustible y las paritarias, en algunos casos aún quedarían lejos de la tarifa técnica promedio para una ciudad de 55.000 habitantes, estipulada en valores que rondan los 37 pesos.
Sin embargo, la principal queja que recibió el equipo de Kicillof frente a la posible política para el transporte público de pasajeros es que las empresas de las ciudades del interior se sintieron “discriminadas” en el reparto de los subsidios. Según explicaron desde la Catapib, el Conurbano y La Plata recibieron $25.000 millones de subsidios, cifra que se ajustó durante todo este año en $2.000 millones. En el mismo período el subsidio para el transporte para el resto de las localidades de la provincia pasó apenas de $1.800 a $1.900 millones.
Las tarifas de la Ciudad de Autónoma de Buenos Aires y el Conurbano para el transporte público de colectivos es de $18, pero la tarifa técnica ronda un dólar. Sin embargo, muy pocos usuarios pagan la tarifa total ya que, según fuentes del sector, el promedio que se paga es de $13 por el uso de la Red Sube. Así, en la Ciudad el usuario paga USD 0,27; el Estado, USD 0,50 y falta cubrir USD 0,28 que «nadie paga” y que preavisan un nuevo reclamo de tarifa.
