El director del Indec, Marco Lavagna, destacó que el Censo Económico avanza con un gran nivel de adhesión por parte de las empresas, y ahora, de los autónomos, a pesar de las dificultades que generó la pandemia de coronavirus.
El Censo económico «es una herramienta esencial tanto del sector privado como público. Con la garantía del secreto estadístico, se podrá saber con qué recursos humanos y técnicos se cuenta en una región a la hora de hacer una inversión», explicó Lavagna en declaraciones a Télam.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) inició el 30 de noviembre el Censo Nacional Económico 2020/21, el primero desde el 2004/5, que trazará un mapa sobre la cantidad de empresas que hay en el país, su actividad, tamaño y antigüedad, entre otras características.
También relevará a los trabajadores autónomos y monotributistas, para tener una muestra más clara de estos sectores de la economía, todo con el mayor resguardo del secreto estadístico.
Con el Censo «comenzamos a fines de noviembre y hemos tenido una muy buena colaboración tanto de las empresas como de los bancos y organismos oficiales», explicó Lavagna.
Las empresas tienen hasta el primero de abril para ingresar al Indec y completar el cuestionario, o bien, responder el que se le envía por mail.
Desde el 1 de febrero «es el turno para que los autónomos completen la información acerca de la actividad que desarrollan. Estos tendrán hasta el primero de mayo para completar la información», ya sea ingresando a la página del Indec o a través del mail que se les ha enviado, dijo Lavagna.
A partir del 1 de marzo será el turno de los monotributistas, quienes tendrán plazo hasta el 1 de junio para hacer su presentación y recibir el correspondiente certificado.
Si alguno no lo hiciera, tendrán restricciones para operar con la AFIP y los bancos, sin embargo, Lavagna se mostró confiado en que esos serán «casos aislados, porque venimos teniendo un aumento en la tasa de respuestas».
Los bancos de todo el país comenzaron a recordarle a sus clientes que si no responden el Censo Económico 2020/2021 no podrán realizar determinadas operaciones.
De esta manera, cumplen con una medida que dispuso el Banco Central a fin del año pasado y cuya obligatoriedad se extenderá hasta el 2022. El censo alcanzará a unas 700.000 empresas y a cinco millones de personas físicas.
«La toma de la muestra queremos terminarla en junio, para comenzar el procesamiento de datos que nos llevará seis meses y presentar a fin de año un primer informe de demografía empresarial. Cuántas compañías hay, cuantas nacen y termina, qué edad tienen», entre otras características, explicó Lavagna.
«Es necesario destacar la importancia de esta información. Hemos tenido mucha colaboración por parte de los bancos y empresas proveedoras de servicios públicos», señaló el funcionario.
A diferencia del censo del 2004/5, cuando la informática no estaba tan extendida, esta encuesta «tienen los costos son muy bajos, más que nada, la necesidad de mayor almacenamiento», en lugar de la del 2004/5 «que se tardó cinco años en procesarlo con 15.000 personas yendo a todos lados con planillas».
El primer enfoque «termina este año, y en dos años tendremos los resultados completos», concluyó Lavagna.
Fuente: telam