El Colegio de Abogados de Capital Federal impugnó la postulación de Domingo Juan Sesín y Eugenio Carlos Sarrabayrouse, los dos aspirantes propuestos por el kirchnerismo para ocupar las vacantes en la Corte Suprema de Justicia. Eduardo Awad, presidente del CPACF, le envió al ministro de Justicia Julio Alak una nota con los argumentos de la decisión.
Sarrabayrouse se desempeña en la actualidad en la nueva Cámara Nacional de Casación. Fue designado allí por impulso de la presidente Cristina Kirchner, en 2013. Con un alto perfil académico, es doctor en Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y estudió en Alemania. Docente en la Universidad de Palermo y en la UCES, tiene al medio ambiente como una de sus especialidades. En 1998 fue premiado por la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales.
Sesín, en tanto, preside el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, donde fue designado por Ramón Mestre, papá del intendente de la capital provincial. Es doctor en Derecho y Ciencias Sociales y está especializado en derecho administrativo. Enseña en la Universidad Nacional de Córdoba y en la Austral y escribió varios libros y publicaciones.
Tras conocerse la nómina de los candidatos, la UCR hizo público su desacuerdo con tales postulaciones. En esa oportunidad, Ernesto Sanz repudió a Sesín y Sarrabayrouse para reemplazar a Eugenio Zaffaroni y a Carlos Fayt, quien pese a haber presentado su renuncia, dejará su cargo el 11 de diciembre, una vez finalizado el mandato presidencial.
«Como presidente del radicalismo adelanto que no vamos a acompañar esto. Si hace un año no había legitimación de Cristina Kirchner para presentar candidatos para la Corte, hoy, a 20 días de la elección, menos», afirmó en octubre el titular de la UCR.
En tanto, Alak criticó en su momento la «actitud autoritaria y antirrepublicana» de la oposición de negarse a tratar el pliego de Roberto Carlés para integrar el Máximo Tribunal y dijo que la presentación de dos nuevos candidatos responde a la necesidad de «garantizar el normal desempeño de la Corte», por lo que había pedido que ese proceso no quedara sometido a «los avatares del proceso electoral».
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