El ingreso de dos iraníes con pasaportes falsos y la reciente fuga del matarife Alberto Samid a Belice pusieron en estado de alerta máximo a todo el sistema de controles en las fronteras de la Argentina al punto tal que el presidente Mauricio Macri encomendó expresamente un refuerzo de un paquete de medidas de migraciones que se acaban de poner en marcha bajo estricta reserva.
La idea del Gobierno es que no se vuelvan a repetir filtraciones en las fronteras argentinas y que el país sea realmente confiable en términos de control migratorio. Así, desde la Dirección Nacional de Migraciones dispusieron nuevas medidas tendientes a extremar los controles.
Según confiaron a Infobae fuentes calificadas de la Casa Rosada, la Dirección de Migraciones a cargo de Horacio García implementó un esquema de «controles cruzados». Es decir que los inspectores de migraciones no sólo serán controlados por los supervisores de los puestos fronterizos. También se exigirá a un órgano interno superior denominado DIAC, que trabaja las 24 horas todos los días del año para que corrobore al instante con las oficinas de Interpol en Lyon la información de un extranjero.
«En adelante, el supervisor no podrá liberar o dejar ingresar a un extranjero con datos dudosos hasta tanto la oficina DIAC avale ese ingreso», explicó un funcionario del Gobierno que trabajó en los últimos días en la implementación de estos nuevos sistemas de controles migratorios.
Sucede que cuando el 12 de marzo pasado los iraníes Sajjad Samiei Naserani y Mashoreh Sabzali llegaron a Ezeiza desde España con pasaportes falsos de Israel el inspector de Migraciones requirió el aval del supervisor para permitir el ingreso. Y finalmente pudieron entrar porque el supervisor dio el visto bueno. Ambos funcionarios de migraciones están siendo investigados y tienen un sumario interno. Pero hacia el futuro esto no va a volver a ocurrir por los controles del DIAC.
Al mismo tiempo, la Dirección de Migraciones tiene en su base de datos al menos 11 informes de características diferentes de pasaportes israelíes falsos cuya información será actualizada. Allí se destacan los diversos tipos de anomalías que puede presentar un pasaporte de Israel a tener en cuenta. Algo similar ocurre con pasaportes de países de Europa del Este o de Turquía que también resultan altamente vulnerables.
Otra de las herramientas que la Dirección de Migraciones acaba de instalar es la base de datos de una «biblioteca digital» de los pasaportes de casi todo el mundo. Se trata de un software especial que la Argentina compró por medio de una licitación a la empresa 3M. Esta compañía tiene uno de los mayores software del mundo con la base de datos de al menos 198 países que emiten pasaportes.
Con la actualización permanente de este sistema de la empresa 3M la Argentina confía en que en el futuro inmediato será casi imposible que ingresen al país ciudadanos con pasaportes falsos. Es el mismo sistema que usa actualmente la Homeland Security de Estados Unidos y la dirección de migraciones de algunos países europeos.
Luego de que Samid se fugara a Belice y posteriormente fuera capturado para traerlo de regreso a la Argentina hubo también un replanteo del sistema de seguridad migratorio que vulneró el empresario de la carne.
El secretario de Seguridad Gerardo Milman dijo que hubo confirmaciones de que el «el rey de la carne» se movió por Paraguay, Panamá y Belice, su destino final. «Samid salió ilegalmente desde la Argentina por un paso no habilitado e ingresó legalmente al Paraguay el día de 24 de marzo. El día 25 estuvo en Panamá y el 26 llegó a Belice», resaltó Milman.
Todo esto se encuentra bajo revisión e investigación por parte de las autoridades de Migraciones. Se presume que Samid pasó por una zona porosa de la frontera con Paraguay en la provincia de Formosa, por un paso ilegal.
De todas maneras, en la Dirección de Migraciones, que depende del ministro del Interior Rogelio Frigerio, se instalarán en los próximos días escaners biométricos en los 237 pasos fronterizos legales que tiene la Argentina. Hay 60 de estos pasos que dependen de la Gendarmería y el resto de la Dirección de Migraciones. El sistema de escaners biométricos fue instalado en al menos 40 pasos de y en lo inmediato se pondrán en 140 más. Este mecanismo permite realizar un chequeo más profundo de los extranjeros o argentinos que ingresen al país.
A la vez, desde el Ministerio de Hacienda que lidera Nicolás Dujovne le prometieron a Frigerio que la Dirección de Migraciones contará en adelante con unos 200 empleados más.
Actualmente hay 3.800 empleados en los puestos migratorios de todo el país. El Ministerio del Interior quiere elevar ese número a 4.000 empleados.