En medio del pedido de moderación salarial que hizo el presidente Alberto Fernández mientras el Gobierno negocia con el FMI, el intendente del partido bonaerense de Villa Gesell, Gustavo Barrera, enrolado en el peronismo, anunció un aumento del 53% para los trabajadores municipales y aseguró que, “desde 2014 hasta la fecha, el incremento del salario asciende a 1.500%, es decir, se ha hecho un gran trabajo y eso hay que remarcarlo”. “Debe ser uno de los mejores aumentos de la provincia de Buenos Aires”, destacó.
El incremento se pagará en tres tramos, con los sueldos de abril, julio y septiembre próximos y contará con un sistema de adelantos y cobro de sumas fijas. Además, se informó que si la inflación supera este año las previsiones de máxima, estimada en el 40%, se podría reabrir la paritaria en noviembre. Cuando se paguen los aumentos, el sueldo mínimo quedará en $ 30.600, con un básico de 20.000 pesos.
El acuerdo incluye el pase a planta permanente de unos 80 empleados en 2020, como expresión de continuidad de una decisión que ya se había puesto en marcha y que permitió que más de 700 trabajadores municipales lograran la estabilidad laboral en los últimos cinco años.
La decisión de pagar semejante aumento salarial, que se aleja de la pauta fijada por la Casa Rosada, no parece ajena a la incómoda situación en que quedó Barrera luego del crimen de Fernando Báez Sosa. El jefe comunal ha recibido críticas por los nulos controles en los locales bailables y por la escasa presencia policial durante la noche en que los rugbiers cometieron el asesinato en la puerta de un boliche.
Durante la conferencia de prensa en la que Barrera anunció la firma del acuerdo salarial estaban presentes los dirigentes de la Federación de Trabajadores Municipales de la Provincia de Buenos Aires, cuyo secretario general, Oscar Ruggiero, destacó que “este acuerdo paritario es algo inédito en la Provincia, es un gran trabajo y nos hace sentir muy orgullosos. Esto no sucede en todos los municipios. Tenemos un intendente coherente y consciente de las necesidades de los trabajadores”.
Antes de ser intendente, Barrera se desempeñó como presidente del Concejo Deliberante del municipio. Ingresó como concejal en la lista que llevaba a Jorge Rodríguez Erneta como intendente en 2007 y 2011. Si bien su primera elección como jefe comunal fue en 2015, llegó antes a la intendencia: en 2014 asumió luego de que Erneta renunciara para incorporarse al equipo de trabajo de Florencio Randazzo, como subsecretario del Ministerio del Interior.
En 2015, Barrera asumió por el Frente para la Victoria luego de ganar con el 51,25% de los votos. En octubre de 2019 fue reelegido con la boleta del Frente de Todos, con el 60,56% de los sufragios.
Mientras Barrera otorgaba el 53% de aumento salarial, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, sigue complicado para alcanzar un acuerdo a cuenta de las paritarias de este año con UPCN, ATE y la Federación de Gremios Estatales y Particulares de la Provincia de Buenos Aires (FEGEPPBA).
En una nueva reunión que tuvo lugar hoy, los sindicatos rechazaron una nueva propuesta que efectuó el mandatario provincial, que consistió en una suma fija remunerativa mensual no bonificable de 1.500 pesos para recuperar la inflación de 2019, a pagar desde el 1° de febrero para quienes no superen los 60 mil pesos, y una suma fija de 1.500 pesos a partir del 1° de marzo, como anticipo del aumento para 2020, más el compromiso de la reapertura del convenio salarial en el mes de abril.
Para intentar convencer a los sindicatos, la administración bonaerense confirmó durante el encuentro que pasarán a planta permanente 4500 empleados.
«Antes de discutir la paritaria 2020, tenemos que cerrar la de 2019. Los estatales no podemos darnos el lujo de discutir las paritarias estando 35% abajo”, advirtió Miguel Ángel Zubieta, dirigente de FEGEPPBA de la rama Salud Pública.
Distintos medios destacaron que se trató del primer revés que sufrió Kicillof luego de varios encuentros con los sindicatos para intentar un acuerdo salarial con los trabajadores provinciales.