La cuenta regresiva para la renovación de la actual conducción nacional de la CGT comenzará el jueves, cuando se reúna el consejo directivo, que hasta acá preside el triunvirato integrado por Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña.
Si ese día se consigue el quórum para sesionar, con la presencia de al menos 19 integrantes del cuerpo, el consejo directivo podrá fijar la fecha de convocatoria del Comité Central Confederal (CCC), otro de los requisitos obligatorios que deben cumplirse antes de consagrar nuevas autoridades, informaron fuentes sindicales.
Acuña, Daer y Schmid, los triunviros de la CGT.
Recién cuando se reúna el Comité, éste podrá llamar a un Congreso Nacional Extraordinario, que a la sazón elegirá la nueva conducción de la central sindical, la cual, se presume, retomará el modelo de un único secretario general.
Esta será la segunda reunión del consejo directivo de la CGT en lo que va del año, luego del encuentro que tuvo lugar a fines de enero.
Los temas principales
Según averiguó Télam, en el orden del día de la reunión de pasado mañana figuran dos temas centrales: «la implementación de los mecanismos estatutarios al efecto de renovar las actuales autoridades de la CGT y distintos asuntos administrativos».
Caló precisó que la UOM «continúa como gremio confederado de la CGT, pero al haber renunciado a la Secretaría de Interior el compañero que estaba a cargo (Francisco «Barba» Gutiérrez) no puede ni corresponde que participe».
Fuera de las cuestiones administrativas que la CGT debe atender para reinventarse, voceros del sector manifestaron: «Está pautada una cumbre sindical para el 17 de abril, en la que se alumbrará una lista de consenso que en principio encabezaría Héctor Daer».
En dicha cumbre, motorizada por tercera vez consecutiva por la Confederación de Gremios Energéticos (Catheda), participará una amplia cantidad de secretarios generales.
A la cumbre ya confirmaron su presencia dirigentes que pertenecían hasta hace semanas al núcleo de gremios vinculados históricamente a Hugo Moyano; «los gordos» (grandes gremios de servicios) e independientes; las 62 Organizaciones, el Movimiento de Acción Sindical Argentino (MASA); la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y la Corriente Federal de Trabajadores (CFT).
En ese ámbito, puramente político, o de «rosca» como dicen los propios caudillos sindicales, se fijará la fecha del congreso extraordinario que alumbrará un nuevo jefe, en reemplazo del actual triunvirato.
Los desafíos de la nueva cúpula
Con independencia de los nombres en danza, la próxima cúpula cegetista tendrá como prioridades la elaboración de propuestas socioeconómicas, y la misión de agilizar los mecanismos de negociación con la administración de Mauricio Macri.
La conducción cegetista quedó fracturada a fines de 2017, cuando se agudizaron los enfrentamientos entre el sector moyanista y el resto de los referentes de las diversas corrientes internas.
En diciembre, la mayoría de los dirigentes sindicales hablaban ya -puertas adentro- del «agotamiento» del triunvirato, pero las protestas contra la reforma previsional aceleraron los tiempos.
El broche de oro lo puso el hijo del líder camionero, cuando renunció como secretario gremial de la CGT y abandonó la sede de la calle Azopardo, lo que dio pie al inicio del proceso de renovación, largamente reclamado por la mayoría de los gremios.
El Tribuno
