El Kremlin advirtió este domingo que las conversaciones previstas para este lunes en Riad entre Rusia, Estados Unidos y Ucrania para discutir la reanudación de la tregua en el mar Negro serán “difíciles”.
Según indicó, los negociadores de Moscú abordarán los múltiples escollos que existen en torno a la cuestión, recordando que la tregua anterior, en 2022, fue garantizada por el secretario general de la ONU, António Guterres.
Moscú, sin embargo, ha rechazado por el momento cualquier tregua total en Ucrania, tanto la propuesta de seis meses impulsada por Europa como la de 30 días sugerida por Estados Unidos.

“Primero hay que entablar unas complicadas conversaciones técnicas”, indicó Peskov, agregando que, una vez alcanzado un acuerdo preliminar, los mandatarios discutirán más concretamente las perspectivas de su reunión.
Según el vocero del Kremlin, la reciente conversación telefónica entre Putin y Trump, que se extendió por dos horas, fue “franca y constructiva” y marcó un cambio de tono respecto a la administración anterior de Joe Biden. “Hablan de paz, de cooperación económica beneficiosa para todos… ese tono nos gusta mucho más”, señaló.
No obstante, llamó a no hacerse ilusiones y aseguró que para lograr la paz en Ucrania “aún queda un serio y arduo trabajo por delante”. “Sólo estamos al principio del camino”, afirmó, y recordó que Putin apoya la idea de un alto el fuego, aunque destacó que hay muchos escollos en el camino.
A la cita en Riad asistirán el jefe del Comité de Asuntos Internacionales del Senado ruso, Grigori Karasin, y el asesor del Servicio Federal de Seguridad (FSB), Serguéi Beseda. Si bien las expectativas son moderadas, Karasin aseguró que esperan lograr avances, aunque sea en un solo punto de la agenda.
Mientras tanto, Rusia lanzó una nueva advertencia a Ucrania, asegurando que responderá si continúan los ataques contra su infraestructura energética, pese a la tregua energética unilateral que Moscú declaró esta semana. El gobierno de Volodímir Zelensky, por su parte, ha dejado claro que la tregua debe incluir a toda la infraestructura civil y ha entregado una lista a Washington, que deberá ser cotejada con Moscú.

Por otro lado, el Kremlin calificó como “muy, muy peligroso” el paraguas nuclear propuesto por el presidente francés Emmanuel Macron para proteger a sus aliados europeos de una eventual amenaza rusa.
Peskov criticó la “agresiva” postura de Bruselas y la presión de Trump sobre sus socios para aumentar el gasto en defensa hasta el 5% del PBI.
“Europa debería estar interesada en la paz, pero en lugar de eso hablan de guerra y de cómo proceder a su militarización”, sostuvo el portavoz ruso. También cuestionó el financiamiento de esta estrategia: “¿De dónde sacarán 800.000 millones de euros (870 millones de dólares) para esta feroz militarización? En vez de dedicarlo a la política social o a derribar los muros con Rusia, están sumidos en una lógica bélica”.

Moscú advirtió que la retórica nuclear de Macron representa una amenaza directa para su seguridad nacional y exigió incluir el arsenal europeo en futuras negociaciones de desarme estratégico con Estados Unidos.
Por su parte, el enviado especial del presidente Trump, Steve Witkoff, se mostró optimista de cara a las negociaciones de las próximas horas: “Creo que veremos un progreso real en Arabia Saudita el lunes, especialmente en lo que respecta al alto el fuego en el mar Negro para los barcos entre ambos países. Y a partir de ahí, se tenderá naturalmente hacia un alto el fuego total”, declaró en una entrevista con Fox News.
(Con información de EFE)
Fuente Infobae