En los últimos 10 días, el número de sacerdotes detenidos en Nicaragua continúa creciendo y este lunes llegó a 14, acorde a las denuncias de religiosos y activistas humanitarios en exilio.
Ni el gobierno ni la policía se refirieron a la situación de los religiosos.
El portal gubernamental El 19 Digital resaltó, en cambio, una masiva vigilia de fin de año de miles de evangélicos del «Ministerio Ríos de Agua Viva», realizada en el sureste de Managua con apoyo de la policía, los bomberos y la alcaldía capitalina.
«El papa Francisco ha recordado con preocupación a nuestros obispos y sacerdotes secuestrados por la dictadura y a sus familias. También ha orado por ellos y ha pedido orar por Nicaragua. ¡Gracias Santo Padre!», dijo en la red social X el obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, que por petición del Vaticano salió del país el 2019.
Fuerte tensión en Nicaragua entre el Gobierno y la Iglesia católica
La relación entre la Iglesia y el gobierno se deterioró durante las protestas del 2018, luego de que Ortega acusara a religiosos de apoyar a los opositores en lo que consideró un intento de golpe de Estado.
Las protestas con bloqueos de autopistas y choques entre opositores y partidarios del gobierno dejaron más de 300 muertos, según datos de la ONU. Una decena de organizaciones de nicaragüenses en el exilio pidieron ayer el apoyo internacional para lograr la liberación de 120 opositores presos en Nicaragua, así como de los sacerdotes.
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