Durante los saludos finales, después de la audiencia general, el papa Francisco recordó hoy a los miles de fieles congregados en la Plaza de San Pedro, que hoy en su patria se celebra la fiesta de la Virgen de Luján, patrona de la Argentina. “En mi tierra natal, se celebra la solemnidad de Nuestra Señora de Luján. Recemos todos juntos por la Argentina”, pidió el Santo Padre.
También habló el pontífice de que el sábado pasado, en la ciudad de México, fue proclamada beata María de la Concepción Cabrera, madre de familia, que testimonió el valor salvífico de la Cruz de Cristo, inspirando la fundación de varias instituciones religiosas y laicas y pidió un aplauso para la beata “Conchita”.
A los peregrinos franceses recordó la figura de Jean Vanier , fallecido ayer. “Un gran hombre de la Iglesia. Trabajó para los más pobres, para los más descartados, incluso para aquellos que fueron condenados a muerte en el vientre de su madre. A veces se intenta convencer a los padres a echarlos y a no dejarlos nacer. Él les recibió y les dio la vida. ¡Qué Jean Vanier siga siendo un ejemplo para todos nosotros, ayúdanos desde el cielo!”
También recordó Francisco que hoy Polonia celebra a su santo patrono, San Estanislao, obispo y mártir y exhortó a los peregrinos polacos a tener en cuenta las virtudes del santo “…su fidelidad a los valores morales y espirituales evangélicos” y les pidió que fueran para cada uno de ellos y para su nación, “un punto de referencia, en las decisiones y en las obras, y frente a los desafíos de nuestros tiempos”.
AICA
