La Fórmula 1 es una de las tantas actividades deportivas que tuvo que suspender por tiempo indefinido su calendario 2020 debido al avance de la pandemia de coronavirus en todo el mundo. Sin actividad en toda la temporada, con nueve de los 22 Grandes Premios postergados o desestimados, la categoría trabaja en un plan para que los motores de la máxima categoría del automovilismo finalmente se enciendan con una fecha definida.
Con la cancelación definitiva de las carreras en Australia y Mónaco, sumado a la pruebas aplazadas hasta el momento en los circuitos de Bahréin, China, Vietnam, Países Bajos, España, Azerbaiyán y Canadá, el calendario marca que la inauguración en pista del año para la F1 sería el próximo 28 de junio con el GP de Francia en el autódromo de Paul Ricard. Pero, teniendo en cuenta que el país europeo es uno de los que más sufrió por la pandemia, y que todavía rigen medidas de confinamiento en el territorio nacional, se estima que la carrera se sumará al lote de las postergadas.
Con este escenario, la organización de la Fórmula 1 intentaría que los motores comiencen a sonar en Austria, el Gran Premio que le seguiría en el calendario al que se debería llevar a cabo en territorio francés y todavía se mantiene en suspenso. Con fecha estipulada para el fin de semana del 5 de julio, el apuntado para llevar adelante las negociaciones con las autoridades locales es el asesor del equipo Red Bull, el austríaco Helmut Marko.
Entre las posibilidades que se plantean los directivos de la F1 está la de realizar dos fechas consecutivas en el mismo trazado. Es decir que, además de la carrera señalada para el primer domingo de julio, se correría otra a los siete días, es decir el 12 de julio. Ambas competencias tendrían como sede el Red Bull Ring, autódromo ubicado en la villa de Spielberg, cerca al poblado de Zeltweg, que oficia como sede del campeonato mundial de la categoría desde 2014, luego de ser remodelado.
Para llevar adelante la realización de la competencia en suelo austríaco, los dirigentes de la Fórmula 1 planifican cuidados extremos para preservar a los equipos y pilotos de la posible circulación del virus COVID-19. El estreno 2020 de la categoría sería sin público, invitados y medios de comunicación, exceptuando los que sean parte de la transmisión oficial de la competencia. Además, la intención sería la de reducir el personal de los equipos al mínimo necesario por las escuderías y aislar a los protagonistas de la población más cercana a la pista.
Otra de las propuestas entre las negociaciones entre Marko, el consejero deportivo del equipo Red Bull, y las autoridades del gobierno de Austria, sería la de mantener alojados a todo el staff de la F1 en el mismo lugar durante las dos semanas, si finalmente se define que exista una doble fecha.
Otra de las variantes que analizan los directivos de la Fórmula 1 sería correr competencias consecutivas también el circuito de Silverstone, en Gran Bretaña. Es importante recordar que tras el Gran Premio austríaco, el calendario marca que la próxima prueba sería en Gran Bretaña, el 19 de julio.
Hace algunos días, director deportivo de la F1, Ross Brawn, indicó que lo más seguro sería que la temporada podría comenzar en julio en Europa, posiblemente a puertas cerradas para mantener las medidas de prevención contra el coronavirus, pero con el objetivo de poner en funcionamiento una maquinaria deportiva que mueve millones de dólares y que se vería afectada seriamente si no se puede poner en marcha.