Las aventuras de Tintín dejaron una huella imborrable en la historia del cómic, y entre sus títulos más aclamados se encuentra El Lotus Azul. Según Paris Match, este quinto envío publicado originalmente en 1936, marcó un punto de inflexión en la trayectoria de Hergé, alejándolo de los clichés occidentales para abrazar una representación más auténtica de China y su cultura.
Una colaboración que rompió barreras culturales
En los años 30, Hergé había situado a Tintín en escenarios como la Unión Soviética, el Congo y América, lugares representados desde una perspectiva occidental que reproducía estereotipos comunes de la época.
Este consejo llevó a Hergé a conocer a Tchang Tchong-Jen, un joven estudiante chino de la Academia Real de Bellas Artes de Bruselas, quien se convertiría en un colaborador clave.
Esta representación enriqueció la narrativa y además reflejó una amistad genuina que trascendió el cómic. En palabras de Tchang, publicadas en Paris Match en 1984: “Más le hablaba de mi país, más veía sus ojos brillar. Estaba imaginando El Lotus Azul”.
Una historia detrás de la publicación
La edición original de El Lotus Azul se lanzó en 1936 en blanco y negro, con 124 páginas que habían sido previamente serializadas entre 1934 y 1935.
En 1942, la editorial Casterman optó por reducir el formato a 64 páginas y adaptarlo al color, una versión que fue nuevamente modificada por Hergé en 1946. Esta fue la versión que se convirtió en referencia para los lectores durante décadas.
Sin embargo, la versión original resurgió recientemente gracias a la iniciativa de Casterman de restaurar los álbumes de los años 30.
La nueva edición incluye una introducción de Philippe Goddin, experto en la obra de Hergé, quien destaca su importancia como una ventana al talento del autor y a su compromiso con la autenticidad cultural.
Uno de los elementos más llamativos de esta edición es la portada descartada de Hergé, que representaba una jarra y un dragón, creada en 1936.
Aunque no se utilizó para la publicación inicial, el dibujo original se convirtió en una pieza invaluable, siendo subastado en 2021 por casi 3.3 millones de dólares.
El legado de Tchang y la reivindicación cultural
La figura de Tchang Tchong-Jen, tanto en la vida real como en el cómic, continúa siendo un símbolo de conexión y entendimiento cultural.
Su amistad con Hergé no solo influyó en El Lotus Azul, también reapareció décadas después en Tintín en el Tíbet, consolidando la narrativa como una de las más personales del autor.
En paralelo al lanzamiento de la nueva edición, Casterman y Moulinsart publicaron Tchang Tchong-Jen, artista viajero, una biografía escrita por su hija, Tchang Yifei, junto con Dominique Maricq, especialista en la obra de Hergé.
Este texto ofrece una perspectiva más íntima de la vida y legado de Tchang, quien jugó un papel crucial en la transformación de Hergé como artista.
Un nuevo capítulo para una obra eterna
La reedición de El Lotus Azul permite redescubrir una joya del cómic y al mismo tiempo reflexionar sobre la importancia del respeto y la representación cultural en el arte.
En palabras del comunicado de Casterman, esta versión “revela la intensidad de la acción y la belleza de las viñetas”, consolidando al álbum como un hito en la historia del noveno arte.
Al explorar las raíces de El Lotus Azul, se encuentra un testimonio de cómo el arte puede ser transformado por la curiosidad y el entendimiento mutuo, marcando un antes y un después en la obra de Hergé y en la percepción del cómic como vehículo de representación cultural.
Fuente Infobae