Bajo el lema «Espíritu Santo perfecciona la obra que Jesús comenzó en mí», 14 personas recibieron el Sacramento de la Confirmación. La celebración Eucarística se realizó este sábado en la Escuela del barrio El Rincón y estuvo presidida por el obispo diocesano Vicente Bokalic quien instó a los presentes a cumplir el mandamiento de Jesús «Amensen unos a otros como yo los he amado».
Pese al intenso calor, los confirmados vivieron a pleno la ceremonia en la que recibieron el Espíritu Santo. En la ocasión estuvieron acompañados por familiares, amigos y miembros de la comunidad perteneciente a Cristo Rey.
Monseñor Bokalic en su homilía dejó un mensaje de esperanza a nuevos soldados de Jesús, «han pasado más de dos mil años y lo seguimos anunciando con mucha esperanza a pesar de tantas cosas malas que hay en este mundo. Jesús es esperanza, vida, alegría, un amor encarnado, alguien que dio la vida, alguien que se ofreció a dar la vida por nosotros».
Más adelante manifestó, «ojalá que se hayan entusiasmado por la causa de Jesús que es el proyecto de Dios Padre de construir este reino de justicia, de bondad, un reino de vida. Hoy lloramos tantas muertes las físicas y aquellas donde no hay esperanza, donde hay depresiones, mucha violencia».
El pastor de la iglesia santiagueña expresó, «Jesús nos trae una propuesta nueva, él es alguien real hasta los historiadores que no creían en él investigaron y descubrieron que existió. Nosotros, por las escrituras, sabemos que es hermano nuestro y es el hijo de Dios y que venía con una misión».
El obispo manifestó a los presentes, «hoy dan un paso más para caminar con Jesús, yo entrego mis sentimientos y proyectos a él y ustedes creen que él se lo merece; qué me ha dado él, Jesús ha entregado su vida. Nos amó hasta el extremo, hasta su entrega en la cruz, si han descubierto a este Jesús que quiere acompañarlos para que sean libres, personas de bien, que amen y sean amados, entonces pueden seguirlo».
«Aquel que encontró a Jesús no se queda vacío en su vida, en su corazón. Jesús no nos va a llenar de bienes porque no es su misión, pero nos va a enriquecer con el amor que nadie nos dará, si descubrieron a ese Jesús sigan adelante», sostuvo.
A la vez precisó que no es fácil seguir a Jesús y muchas veces, «pedimos que nos muestren el camino y será él quien nos guíe. Jesús nos dejó un sólo mandamiento ‘Amense unos a otros como yo los he amado’ y él nos amó hasta el final, hasta dar la vida».
Dirigiéndose a los jóvenes no dudó en afirmar, «podrán tener crisis y dificultades, pero van a ser felices, para ello van a recibir el Espíritu Santo para que en las horas de dudas, de miedo, de angustia, de tristeza, de desánimo el Espíritu Santo los levante, los ilumine y los llene de amor, si dejamos que ese espíritu actúe en nosotros siempre habrá cosas buenas. Siempre habrá primaveras en nuestra vida, que es el brote de la vida nueva, de mayor amor, de comprensión nos pondremos de pie».
«Que este Espíritu Santo les descubra el camino de Jesús y que digan con alegría yo quiero ser cristiano de obra, cumpliendo el mandamiento ‘Amense unos a otros como yo los he amado'», concluyó.
