«Mañana presentamos el pedido de juicio político a Germán Garavano», adelantó Elisa Carrió, que aclaró que en el acto que compartió con Mauricio Macri no reclamó la renuncia del ministro de Justicia sino su salida a través de este mecanismo. En plena escalada de tensión en la relación con el Presdente, la diputada dijo que volverá a amigarse con el mandatario si Garavano se aleja del Gobierno. «Estoy bien con Macri, salvo obviamente la diferencia en materia de impunidad que creo que se va a ir resolviendo», dijo la legisladora.
La furia de la referente de la Coalición Cívica con el ministro de Justicia se produjo a partir de las opiniones del funcionario, que al hablar sobre las prisiones preventivas consideró que no era bueno para un país tener expresidentes detenidos, en relación al potencial desafuero y arresto de la senadora de Unidad Ciudadana Cristina Kirchner, en la causa de los cuadernos de las coimas. La legisladora calificó sus palabras como «una vergüenza» y anticipó que pediría su salida por juicio político.
«La impunidad para mí no es negociable, yo con eso no transo. Ahí tiene que haber línea recta, no doble juego. Es todo una línea la que cuestiono. Pero no voy hablar más. Se va a ver (la justificación) en el juicio político que presentamos mañana. En lo que estamos unidos, estamos unidos; en lo que tenemos de diferente, no significa que no tengamos unidad», afirmó, en una entrevista a Radio La Red.