Todavía prima la incertidumbre. Es el segundo día de búsqueda del avión que transportaba al futbolista argentino Emiliano Sala del que no se tienen novedades, después del vuelo que partió de Nantes a Gales perdiera comunicación y desapareciera en el Canal de la Mancha. Esta mañana, los servicios de rescate de Guernsey reanudaron la búsqueda con tres aviones, un helicóptero, buzos tácticos y gomones, pero nada ha dado resultado y las tareas serán retomadas mañana al amanecer.
«Después de una búsqueda intensiva usando varias aeronaves y un bote salvavidas en las últimas nueve horas, no hemos encontrado rastro del avión desaparecido. Con la luz ahora desvaneciendo, la búsqueda se suspenderá», afirmó en un comunicado la policía de Guernsey.
Sala, de 28 años, y un piloto viajaban desde Francia a Gales cuando se perdió la comunicación con la aeronave en el momento en el que cruzaban el Canal de la Mancha.
Antes del despegue, el jugador se comunicó con amigos para expresarles su temor por subirse a la avioneta: «Estoy acá arriba del avión que parece que se está por caer a pedazos y me estoy yendo para Cardiff. (…) Si en una hora y media no tienen novedades mías, no sé si van a mandar a alguien a buscarme porque no me van a encontrar pero… ya saben. ¡Papá! Qué miedo que tengo…», fueron las palabras del santafesino de 28 años.
Por otro lado, la Autoridad de Aviación Civil (CAA, en inglés), regulador británico de la aviación, señaló hoy que es «poco probable» que la avioneta llevase caja negra. Las cajas negras que registran los datos de vuelo y las conversaciones de la cabina son obligatorias en aviones comerciales, ya que suponen una pieza vital de información para los investigadores en caso de un accidente. Sin embargo, no son obligatorias para los aviones pequeños y ligeros, como el que viajaba Sala, un Piper Malibú, debido al peso de estas cajas, según el regulador de la aviación.
Pocas esperanzas
«Si realmente están en el agua, diría que no hay chances de encontrarlos con vida», aseguró John Fitzgerald, director de operaciones del Channel Airline Airsearch, la organización que se encarga de las búsquedas aéreas cuando ocurren accidentes en el Canal de la Mancha. Se cree que el avión en el que viajaba el futbolista argentino Emiliano Sala cayó en el mar.
El delantero, revelación en la Ligue 1 en 2018, fue transferido por el club francés Nantes al a Cardiff City, club galés que compite en la primera división inglesa. El jugador viajaba a Cardiff a bordo de una avioneta que desapareció a unos 20 kilómetros al norte de la isla inglesa Guernesey.
En diálogo con So Foot, Fitzgerald manifestó su pesimismo con respecto a la búsqueda: «Diría que no hay posibilidades de encontrarlos con vida. El otro día fui a nadar (al Canal de la Mancha) y resistí tres minutos. Hace mucho frío en estas aguas; una persona como mucho podría aguantar una hora. No creo que hayan aterrizado en tierra porque el tráfico aéreo habría sido informado».
«Lo que buscamos primero es la carcasa del dispositivo. Si el avión realmente se estrelló en el mar, pero permaneció en una sola pieza, entonces hay que prestar atención a los rastros de petróleo que salen a la superficie. Si se rompió en vuelo, lo que no se puede descartar, por una razón u otra, entonces encontraremos escombros en la superficie. Pero un avión de este tamaño que choca contra el agua se hunde en dos o tres minutos», agregó.
#PrayforSala
El mundo del fútbol está en vilo por la búsqueda del avión en el que viajaba Emiliano Sala, que desapareció en el Canal de la Mancha, cuando realizaba el trayecto entre Nantes y Gales.
Futbolistas, excompañeros y técnicos se mostraron consternados por la noticia y pidieron rezar por el joven futbolista que había sido transferido del Nantes, de la Ligue 1, al Cardiff City, de la Premier League por 18 millones de euros.
Vigilia en Nantes
El delantero argentino, que era uno de los ídolos del club francés, se había despedido de sus compañeros luego de firmar un contrato con Cardiff, de la Premier League de Inglaterra. Su paso por Nantes fue inolvidable. Dejó una huella imborrable.
Por eso, cuando se supo que el avión que lo llevaba a Gales había desaparecido, miles de simpatizantes comenzaron a reunirse en la Plaza Royale, uno de los puntos centrales de la ciudad. En ese mismo lugar, los hinchas del Nantes -muchos de ellos emocionados hasta las lágrimas- dejan flores amarillas (el color del club) y llevaron adelante una masiva vigilia.
