Los empresarios del círculo rojo confirmaron el mensaje que tenían preparado como un dardo apuntado al presidente Mauricio Macri: «Lo que usted nos muestre como su desafío, también será el nuestro», le dijo el flamante presidente del Cicyp, Daniel Funes de Rioja, a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal. Y si bien sabían de antemano que la mandataria de Cambiemos iba a rechazar el convite, ratificaron públicamente sus intenciones por una eventual candidatura presidencial. «¿Va a ser candidata a presidente?», soltaron.
Detrás de escena, varios dueños de empresas confiaron que «el problema no es Macri sino (el jefe de Gabinete) Marcos Peña». Aunque también admitieron que el binomio Macri-Peña «es indivisible» por lo que no dudaron en afirmar que «entonces el problema también es el Presidente».
El Grupo de los Seis
La apertura del ciclo de almuerzos que organiza el Grupo de los Seis (G-6) dejó en claro que los dueños de las firmas con más poder del mercado local prefieren a Vidal «porque es la que puede ganarle en el balotaje» a la ex presidenta Cristina Kirchner. Pero también porque se convirtió en un mensaje entrelineas a Macri ante los reclamos por «falta de un diálogo que incluya respuestas», y en medio de la pérdida de poder de parte del jefe de Estado.
Funes de Rioja, que ayer estrenaba su presidencia del Cicyp, hizo subir al estrado a los representantes de todos los sectores privados de la economía nacional, en una foto de fuerte impacto. Rodeado de los presidentes de la CAC, la UIA, la Bolsa de Comercio, la Sociedad Rural, la Construcción y de los banqueros nacionales de Adeba, dijo: «Por coincidencia astral o fortuna, tenemos como primera invitada a la gobernadora Vidal que demostró profesionalismo en la función pública, más allá de la juventud; calidad de gestión que hemos percibido; y visión de liderazgo».
Fue Bettina Bulgheroni la encargada de reducir en dos preguntas las inquietudes del círculo rojo. La primera estaba destinada a la relación que ella podía mantener con los empresarios. La segunda fue mucho más explícita: «¿va a ser candidata a presidente?».
La negativa de Vidal, sin embargo, no puso en dudas el ánimo de entusiasmo que tiene ese espacio con la figura de la gobernadora. «Con esta impronta demuestra que es la líder política que no tiene Cambiemos en el esquema nacional. Y aunque sabíamos que iba a decir que no, era necesario que quedara claro que para nosotros entre las dos opciones en un balotaje la vamos, pero no todos piensan igual», dijo uno de los participantes del cónclave.