En medio de las acusaciones políticas por el costo de la pandemia por COVID-19 y la dificultad para resolver la negociación por el pago de la deuda, los últimos datos oficiales indican que la pandemia no estaría aún “llegando a su fin”, como expresó Cristina Kirchner en su carta de hace dos días. Con el presidente Alberto Fernández recluido en Olivos preventivamente por el contagio de una moza de la residencia presidencial, el Gobierno sigue mirando de reojo con preocupación la evolución de la variante Ómicron en el país, en especial de los casos graves.
Los nuevos contagios parecen haberse estabilizado en una meseta alta que supera los 100.000 diarios, pero lo más preocupante es que los fallecimientos por esta variante surgida en Sudáfrica continúan subiendo. Mientras que en los últimos 15 días los casos subieron 117%, el aumento de fallecidos escaló al 308%. Las cifras surgen del análisis realizado por la Unidad de Datos de Infobae, en base a las cifras informadas diariamente por el Ministerio de Salud de la Nación, por fecha de reporte.
En las últimas 24 horas, se notificaron 128.321 contagios, con una positividad del 73%, y 208 muertos por COVID-19, nuevo récord de esta tercera ola. La escalada por la variante Ómicron comenzó en el país a principios de diciembre y se disparó a mediados de ese mes. La barrera de los 100.000 casos se cruzó el 6 de enero y este lunes 17 casi se alcanzaron los 200 fallecidos.
Si se analiza la media móvil de fallecidos en los últimos 7 días – el indicador de referencia para compensar subas y bajas por retrasos en la carga -, la cifra informada ayer también fue récord: 137 decesos cada 24 horas por COVID-19. En el peor momento de la segunda ola, el 11 de junio de 2021, la media móvil alcanzó los 602 muertos en 24hs. Ya 118.628 personas perdieron la vida en Argentina por el COVID-19 desde el inicio de la pandemia, y el total de infectados asciende a 7.446.626.
“Más allá de que desde el momento del contagio, la hospitalización y el pase a terapia hasta que la persona fallece, hay un período de entre 14 y 21 días promedio, cuando hay un número alto de casos, suben las hospitalizaciones, la ocupación de camas UTI y, por último, las muertes”, le dijo el infectólogo Eduardo López a Infobae, integrante del Comité de expertos que asesoró al Presidente sobre la pandemia.
Aumento de las internaciones
“Estamos viendo por impacto de la Ómicron un fenómeno de internaciones por goteo, que aumentan todos los días un poco y, al final de la película, sube la mortalidad. Si bien esta variante parece ser menos maligna, no es inocua y también puede dar enfermedad grave. Hoy, el 85% de las variantes que circulan en el país, según datos del Ministerio de Salud de la Nación, es Ómicron; el resto es Delta”, agregó el jefe de área Clínica del Hospital Gutiérrez.
En efecto, en los últimos 15 días hubo un aumento en la ocupación de camas en las unidades de terapia intensiva (UTI) del 67%. Los pacientes en cuidados intensivos el 5 de enero eran 1.396; según el parte de ayer sumaban un 65% más: 2.310 las personas atraviesan la enfermedad en estado crítico. La ocupación de camas UTI por COVID-19 pasó en ese período del 37% al 45,2% a nivel nacional, lejos de saturar el sistema, pero con una suba lenta, pero sostenida.
El ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, afirmó ayer que ya no se debe reparar tanto en la cantidad de contagios diarios sino en detectar casos graves a tiempo. ”Hay un pico de casos muy alto, pero si bien aumentan los internados, eso no es en la misma proporción ni lejanamente que la cantidad de contagiados”, sostuvo el funcionario y destacó que el nivel de ocupación de camas de terapia intensiva es menor al 50%.
Para López, “la mayor cantidad de hospitalizaciones está vinculada a la no vacunación”. En Argentina, a la fecha, el 86,2% de la población (39.117.750 personas) tienen la primera dosis; el 75,3% la segunda (34.186.054) y solo el 22% la dosis de refuerzo o la adicional (10.032.556).
“Tenemos 5 millones de individuos que no fueron a vacunarse con la segunda dosis, y no son antivacunas porque ya se dieron la primera. Hoy alrededor del 70% de los que requieren respirador, no están vacunados”, agregó este especialista. ¿Cuál es el motivo?, le preguntó Infobae. “La clave es si la vacunación es pasiva o activa. La vacunación nuestra es pasiva: abrimos los vacunatorios, pero no vamos a vacunar activamente a los barrios. En el Reino Unido abrían a las 7 am hasta las 12 pm. En Argentina, los sábados, domingos y feriados, el número de vacunados disminuye. Deberíamos aumentar la intensidad y la oferta de vacunas en horarios y días. El déficit en la vacunación deriva en mayor hospitalización y muertes”.
Kreplak, por su parte, en declaraciones realizadas ayer, se mostró optimista al considerar que “no falta mucho para que empiecen a descender los casos de coronavirus”, aunque admitió que es necesario continuar con la campaña de vacunación. “En la Provincia hemos comprobado que quien está vacunado tiene 36 veces menos probabilidades de tener una enfermedad fatal de aquellos que no lo están”, aseguró.
En este contexto, el bloque oficialista en la Cámara de Diputados de la Nación presentó un proyecto para que la vacuna contra el coronavirus sea obligatoria. Pero, por el momento, desde el Gobierno afirmaron que no es una medida impulsada por el Ejecutivo.
La situación en las provincias
El distrito que tuvo un mayor aumento de fallecidos por COVID-19 en números absolutos en los últimos 15 días, considerando la media móvil semanal, es Córdoba, con un aumento de 1.250%, donde comenzó la variante Omicron en el país y, ayer, se reportaron 28 decesos por el virtus. El 4 de enero habían sido solo 4 las muertes.
Le sigue la Ciudad de Buenos Aires, donde ayer hubo 24 fallecidos notificados, con una suba del 650% en la media móvil; quince días atrás se habían reportado 5 decesos por el virus. CABA también tiene una alta circulación de Ómicron, y mayor proporción de adultos mayores, y por ende, de mayor riesgo.
Le siguen Santa Fe, que registra un aumento del 500% y 5 muertos notificados en las últimas 24 horas; Chaco con 400% de aumento y 12 fallecidos reportados ayer; y la provincia de Buenos Aires con una suba del 218% en los muertos absolutos, y 65 decesos por COVID-19 en últimas 24 horas, cuando hace 15 días habían sido 16.