Todo se inició mucho antes de la noche del 19 de febrero en la cual ingresaron a robar a la casa de Ulises Bueno, en Córdoba. Y cuando aún se desconoce el monto -a todas luces millonario- al cual asciende el botín, entre dinero en efectivo, lingotes de oro y joyas, el cantante se enfrentó públicamente con su ex mujer, Melisa Ferraris, a quien en un principio había señalado como responsable del asalto.
Hasta esa noche, Ulises y Melisa llevaban seis años juntos. A partir del robo todo estalló entre ellos, incluso el escándalo. Como este jueves, cuando los dos hablaron por primera vez desde el robo. La curiosidad: lo hicieron en el programa Intrusos; ella desde el estudio, y él vía telefónica. «Yo no dije que vos eras (la ladrona)…», dijo Bueno. «Sí, lo dijiste. Vos me pusiste como principal sospechosa», retrucó Ferraris. «¿Por qué te ponés tan mal, si no tuviste nada que ver?». «¡Por eso mismo!». «Pero si a todos nos están investigando…», argumentó el hermano de El Potro Rodrigo Bueno.
Durante la charla en el programa de América hubo acusaciones cruzadas de infidelidad, adicciones varias (droga y alcohol) y malas compañías, «amigos ladrones y guerrilleros» de uno y otro lado. «Vos no tenés amigos de Harvard, no te rodeás de universitarios…», le avisó Melisa, luego de que Ulises deslizara que ex novios de la joven están -o estuvieron- vinculados con la delincuencia, versión que fue desmentida a medias.
Pero quizás lo más delicado esté vinculado con la violencia. En su charla con Melisa, con el periodista Jorge Rial de testigo, Bueno reconoció haberla golpeado. «Sí, le levanté la mano, pero después de que ella me pegara dos trompadas en la cara a mí primero -esbozó el cantante-. Tampoco voy a dejar que abusen de mí. Me pateó la nariz y me pateó la oreja».
«Ay, es muy fuerte…», suspiró la mujer, quien sostiene que hay una filmación de ese incidente. Ulises lo reconoció: «Sí, yo estaba grabando porque ella estaba loca».
«En México me rompió la cabeza de un cabezazo -se explayó la joven-. Eso fue después del casamiento de (Carlos) Tevez, donde se peleó con un invitado, no sé, por la abstinencia». Bueno había sido contratado para brindar un show privado en esa fiesta.
Además de las acusaciones cruzadas de infidelidad, también está la droga. «¿Soy el único que consume en la pareja? Ella es una chica muy sana…», dijo Ulises, irónico. «Me costó un montón salir de esto. El amor por él me ayudó», admitió Melisa, quien minutos después volvió a insistir con que logró superar su adicción a las drogas. «Uno de las cosas más fuertes que me pasaban era llegar a casa y verlo a él drogado, y encontrar una bolsa (de cocaína) en el baño. Y para un ex adicto, eso es lo peor que puede pasar…», dijo Ferraris.
«Se me va cayendo la ilusión de volver con ella», advirtió el músico. «A mí ya se me fue», recogió el guante la rubia. «Es una persona hipócrita». «Lo aprendí de vos». Pero antes de finalizar la comunicación, Bueno intentó un principio de acuerdo: «Yo a ella no la culpé. Nunca la acusé. En el tiempo que estuvimos juntos la amé, la respeté, y traté de hacer las cosas lo mejor posible». Y concluyó: «Los esperó a todos el sábado en el recital».
